La Asociación Forestal de Galicia (AFG), que agrupa a una superficie forestal superior a las 35.000 hectáreas de montes particulares y a 55.000 hectáreas de monte en mano común, demanda una mayor eficiencia y planificación para prevenir incendios forestales. Consideran que la Administración "gasta mucho y no se consigue toda la efectividad", debido a la falta de colaboración. El colectivo celebró su asamblea general en el Auditorio de O Rosal.

Su presidente, Francisco Javier de Ana Magán, manifestó tras la reunión que la AFG, que "se plantea solicitar a la Xunta de Galicia una mayor colaboración con las comunidades de montes y propietarios particulares para lograr una defensa más efectiva". "Queremos que la Xunta consulte con todas las asociaciones forestales gallegas sobre este importante asunto" y que se llegue a tiempo para establecer los medios preventivos para este verano, buscando apoyos de la propia sociedad. De hecho, una de las resoluciones de la asamblea es "abrir el debate sobre la mejora de la lucha contra los incendios forestales, presentando a las autoridades competentes, a los partidos políticos y a la sociedad gallega las propuestas definidas en el informa de la AFG sobre la situación de los incendios forestales".

La AFG iniciará una campaña para tratar de modificar y flexibilizar normativas y procedimientos. Francisco Javier de Ana Magán afirma que "sobran leyes y las que hay son poco claras ". Pone como ejemplo a aquellos propietarios que tienen montes en zona de Rede Natura "y que no saben lo que pueden o no pueden hacer en su monte". Por ello la Asociación pide "normas claras que podamos interpretar para poder aplicar". En este sentido, la resolución tomada en O Rosal es "instar a la Xunta de Galicia y a las autoridades competentes del país al inicio del proceso de revisión de la Ley de montes vecinales en mano común en el marco de un proceso participativo", además de "presentar iniciativas acordadas con los representantes de las comunidades de montes para mejorar la situación de las comunidades que tienen convenios o consorcios en el proceso de cambio de estos acuerdos a los nuevos contratos de gestión". Piden presión institucional para modificar reglamentos que provocan graves obstáculos en la actividad forestal.

El presidente de la AFG incide en el gran potencial que supone el recurso de la biomasa para crear puestos de trabajo, disponiendo de un recurso energético propio. Manifestó que el colectivo se siente "ilusionado" porque el proceso de la biomasa supone mejorar la calidad de los montes, a la vez que el país ahorra en la importación de petróleo. Recordó que la mancomunidad de montes en el Baixo Miño y el Val Miñor ya trabaja para producir biomasa, al igual que madereros, para servir a distintas empresas.