La riqueza natural y patrimonial de la Fraga de Rodas, uno de los parajes de la parroquia nigranense de Chandebrito, corre peligro. Los restos abandonados de una tala de eucaliptos amenazan los tres molinos que se alinean en un tramo de cien metros del río en el barrio de As Tomadas. El más antiguo data del siglo XVIII y los dos restantes, del XIX. Su estructura podría venirse abajo, ya que los autores de la corta han dejado troncos y ramas apoyados sobre las casetas ya deterioradas por el paso de los años. La asociación cultural y vecinal "Chandebrito 1807" ha denunciado el asunto ante la Xunta y el Concello de Nigrán hace más de una semana.

Su presidente, Carlos Gómez, detectó los destrozos e intuye que la tala podría haberse realizado hace meses, puesto que las ramas ya se encuentran secas. Tras indagar sin éxito sobre los propietarios de los terrenos o los autores de la corta con el fin de instarlos a restituir el entorno a su estado original, Gómez decidió poner el caso en conocimiento de las autoridades. "Alguien debe tomar medidas. Es intolerable que hayan causado tanto daño", explica.

El estropicio no se limita a los montones de ramas y troncos acumulados sobre los molinos. El paso de tractores y otros vehículos pesados para realizar los trabajos ha dejado la pista de acceso al conjunto histórico y paisajístico impracticable. Además, han roto la señalización explicativa que el Ayuntamiento había colocado en el lugar con cargo a fondos europeos Proder. Los carteles se encuentran tirados junto al vial.

El gobierno municipal abrirá una investigación para conocer el alcance de los daños y buscar posibles responsables. Así lo indicó ayer el alcalde accidental, Alberto García. Pese a no tener constancia todavía de la denuncia, el regidor en funciones aseguró que enviaría a la Policía Local a la zona para que realice un informe. "No podemos permitir que se destruyan bienes públicos o privados de forma impune", dijo.