Un siglo en Filgueira da para mucho. Son cien inviernos duros y muchos trenes pasando, los trenes de la orilla del Miño, como el de la canción de Andrés Do Barro. Pero Josefina Carpintero Fernández nunca cogió ninguno para asentarse en otro sitio.

Ayer cumplió 100 años y se ratificó como la mujer de más edad de su parroquia y la tercera del concello de Crecente, donde le superan otras dos mujeres, una de 101 años y otra de 106.

El aniversario merecía una fiesta, explica su segundo sobrino Sergio, a la que asistieron numerosos vecinos. "Después de recibir diversos regalos, sopló aún con fuerza e ilusión las velas de los 100 años", indica.

Su familia le describe como una mujer de mucho carácter, luchadora, con ironía y a la vez bromista y cariñosa. "Siempre esta pendiente de los suyos, es muy protectora", apuntan.

"Nació en Filgueira y vivió toda la vida en esta parroquia, de la cual presume en voz alta siempre. Dice que como en Filgueira no se vive en ningún sitio", cuentan. "Filgueira é Filgueira", señala.

No se cansa de contar que no ha tenido hijos pero ha tenido la suerte de tener siempre a su lado a sus sobrinos, de los que dice la hacen sentir como una reina por sus cuidados. "Cuando estoy en casa no me falta de nada y cuando estoy en el hospital, que últimamente por desgracia estoy visitando a menudo, no me dejan ni un minuto sola, se organizan para que siempre me encuentre acompañada", explica la centenaria.

Cuando le preguntan por la edad que tiene y ella responde, la gente se sorprende; entonces es cuando ella con su ironía responde: " Tampoco son tantos".