La estación de servicio de Vincios podría salvarse definitivamente del derribo. Así lo pretende al menos la Xunta. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras ha modificado el proyecto sectorial del polígono de A Pasaxe para incluirla en el ámbito de ordenación y evitar así la orden de demolición dictada de forma definitiva por el Tribunal Supremo hace exactamente un año. La propuesta mantendría en pie la instalación, pero no los boxes de lavado, construidos sobre el río Zamáns y también condenados a desaparecer por orden judicial. El Ejecutivo gallego insta a la empresa, Combustibles del Noroeste, a eliminarlos y recuperar el cauce natural.

Los cambios en el plan de ordenación del polígono surgen casi tres años después de su aprobación, en mayo de 2011, y sin que la urbanización haya comenzado a ejecutarse.

El encaje legal de la estación de servicio ha requerido variaciones en los criterios ambientales. Augas de Galicia había descartado su inclusión en el polígono inicialmente al considerar que la instalación se ubicaba en una zona inundable. El organismo califica ahora el entorno como zona de flujo preferente, una figura menos restrictiva.

De este modo, Combustibles del Noroeste podrá mantener el recinto en el que sirve carburantes, pero deberá retirar las diez casetas, seis de limpieza y aspirado de vehículos y cuatro de lavado, que levantó en 2009 sobre el río. Según probó la sentencia del Juzgado de lo Penal Número 2 de Vigo en mayo del año pasado, la firma desvió el cauce del Zamáns de forma artificial para colocar los boxes. Por este delito contra la ordenación del territorio, la magistrada condenó al propietario a seis meses de prisión y a una multa de 4.380 euros y afirmó que las obras habían alterado la rasante natural del terreno, calificado como rústico especialmente protegido.

La modificación del plan sectorial de A Pasaxe que publica la Xunta reclama asimismo a la compañía que derribe dicha canalización de hormigón y restituya el curso natural del agua.

Sin licencia

La incorporación de la gasolinera al plan urbanístico de A Pasaxe permitirá a la empresa obtener licencia. El permiso que el Concello de Gondomar había concedido a Combustibles del Noroeste fue anulado por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que culminó con la orden de demolición definitiva del Supremo en marzo de 2013. Terminaba así un largo proceso judicial, iniciado tras una denuncia de otra compañía del sector, que alegaba un incumplimento de la normativa de ubicación de este tipo de establecimientos, a más de 150 metros de una intersección de carreteras nacionales o autonómicas. Argumentaba además el denunciante que la estación de servicio carecía de los 2.000 metros cuadrados de parcela mínima necesarios.