Desde Arbo y hasta A Guarda, cinco miembros del Instituto de Estudios Miñoranos (IEM) recorren, desde esta semana, las orillas del río Miño para realizar nuevas prospecciones con las que hallar nuevos yacimientos arqueológicos a excavar en el futuro. La riqueza del yacimiento de Porto Maior, en As Neves, y el de O Cabrón, en Arbo, les ha hecho interesarse por el trazado del Miño.

Paralelamente, los arqueólogos continúan trabajando en el estudio del material excavado en 2012 en el yacimiento nevense de Porto Maior, considerado único en Europa por el tamaño de sus piezas. De hecho, los primeros resultados apuntan que este depósito podría ser el más antiguo de Galicia y uno de los más primitivos del ámbito peninsular, con 500.000 años de antigüedad.

El material excavado se estudia en el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana de Burgos, que se encargará de datar este yacimiento nevense y también el de O Cabrón, que se estima que puede tener en torno a 300.000 años de antigüedad. Los resultados se esperan para finales de este verano. De hecho, para calcular la edad se aplicará el método de Resonancia Paramagnética Electrónica (ESR), que en España solo ha sido utilizado en Atapuerca y en un yacimiento en Granada.

En la zona de Porto Maior, se han encontrado1.500 piezas y, de ellas, aproximadamente 300 son más grandes que la media de las halladas en la península Ibérica. Algunas alcanzan incluso los 30 centímetros, un tamaño más habitual, según explica el experto del IEM, Eduardo Méndez, de los yacimientos de África, ya que en los europeos las piezas no miden más de 15 centímetros.

Los expertos del IEM esperan con estos análisis puedan incluso determinar cuál era la capacidad intelectual de las personas de aquel período prehistórico, teniendo en cuenta la destreza del tallado de las piezas encontradas en ambos yacimientos.

Falta de financiación

Para seguir trabajando en las nuevas prospecciones, en el análisis del material de Porto Maior y en muchos otros proyectos similares puestos en marcha o programados, los especialistas del Instituto de Estudios Miñoranos necesitan financiación. Por eso, su junta de gobierno hace un llamamiento para pedir colaboración económica.

Su escasez de fondos se debe a la necesidad de afrontar diversos gastos derivados de su actividad y al retraso de varios ingresos pendientes de cobro. Necesitan reunir 5.860 euros y para lograrlo facilitan un número de cuenta en su página web www.minhor.org.