El alcalde de Ponteareas, Salvador González Solla, ha convocado para hoy a las 14.00 horas el pleno más importante de la década en la localidad: la aprobación inicial del Plan Xeral de Ordenación Municipal. Ponteareas está sin planeamiento desde que en 2002 fuera suspendido por la Xunta.

El regidor, que hace una semana levantó la sesión ordinaria abucheado por los afectados de las preferentes y terminó con su equipo de gobierno y la secretaria del ayuntamiento saltando por la ventana, piensa celebrar la sesión de hoy contra viento y marea presionado por los plazos y por la posible presentación de una moción de censura de BNG, PSOE y ACIP, que se está negociando.

Para aprobar el Plan Xeral, los populares cuentan con el apoyo del PSdeG-PSOE, que el lunes en la comisión informativa anunció su voto favorable, mientras que BNG y ACIP se reservaron para el pleno. Los nacionalistas anunciaron, ayer en rueda de prensa, que se abstendrán para facilitar la aprobación y presentar alegaciones con las que mejorar algunos aspectos del documento que no fueron tenidos en cuenta, como un incremento de zonas verdes en el centro de la villa, lo que se haría posteriormente.

Los corporativos entienden que el plan puede todavía sufrir modificaciones durante el periodo de alegaciones.

Ante la posible presencia de los afectados de las preferentes, el alcalde ha convocado una junta de portavoces urgente para determinar los pasos a seguir en caso de que existan altercados de orden público.

Abstención

Por otra parte, el BNG dio cuenta ayer en una rueda de prensa de la posición que defenderán en el pleno.

Los nacionalistas recordaron que habían presentado a todos los grupos de la corporación y la empresa redactora del plan un paquete de propuestas para mejorar el documento urbanístico. Propuestas para dar solución a las prioridades que Ponteareas tiene pendientes. "Marcamos los compromisos de los terrenos necesarios para nuevas dotaciones y equipamientos públicos, nuevos espacios libres y zonas verdes, para solucionar las carencias del urbanismo practicado por el Partido Popular en décadas", manifestó Represas.

Punto de partida

El BNG calificó el documento que se somete a aprobación del pleno como un punto de partida al considerar que puede ser mejorado durante la etapa de alegaciones. Represas informó que las propuestas nacionalistas que no fueron aceptadas se incorporarán al documento como alegaciones y serán aprobadas por el pleno. El consenso de los tres grupos de la oposición (BNG. PSOE y ACIP) puede permitirlo.

Aún así el portavoz nacionalista reconoció que en el plan figura la propuesta del BNG de "la consecución, sin coste para el Ayuntamiento, de la parcela necesaria para un nuevo colegio de infantil y primaria". "El PXOM no contemplaba un solo metro cuadrado para nuevas instalaciones educativas y con la iniciativa del BNG se contará con una parcela de 9.000 metros que podrá ampliarse sí fuera preciso", concluyó.