Los concellos de Pazos de Borbén y Fornelos de Montes, con la colaboración de trece comunidades de montes de ambos municipios -Ventín, Fornelos, Traspielas, Calvos, Moscoso, Xunqueiras, Pazos, Amoedo, Borbén, Cepeda, Nespereira, A Ermida y Toutón-, iniciaron en los últimos días batidas por los distintos montes de la zona para proceder a la captura y apresamiento de los caballos salvajes que carecen de microchip o elementos de identificación, ante el riesgo que supone para el tráfico y los daños que causan en las explotaciones forestales agrícolas.

Hasta el momento han sido capturados 62 ejemplares que permanecieron custodiados durante 48 horas en un recinto habilitado en Pazos de Borbén a la espera de que sus propietarios los reclame. Al no aparecer sus dueños, y cumpliendo con la normativa vigente, los animales tras este periodo se están enviados a un centro de acogida fuera de la provincia de Pontevedra.

Las comunidades y ayuntamientos implicados están dispuestos a poner fin a lo que consideran "una situación intolerable" que llevan años denunciando sin alcanzar una solución. Los colectivos justifican la medida ante el grave peligro que supone para los conductores de la comarca la continua presencia de ganado equino y bovino deambulando por las carreteras, puesto que han provocado un elevado número de accidentes, algunos de ellos con heridos graves. El último se produjo el pasado día 4 de enero en la carretera PO-250 (Pazos-Fornelos), donde resultó herido grave un joven panadero de 19 años de edad al colisionar su furgoneta con una yegua preñada.

Ante esta situación los comuneros y concellos acordaron proceder al apresamiento de todos los animales sin identificación que se encuentren en los montes, una iniciativa que tendrá continuidad en el futuro para erradicar de forma definitiva los problemas que causan los caballos mostrencos.

El operativo comenzó el pasado día 20 y durante las últimas jornadas se realizaron varias salidas, sobre todo por los montes de Amoedo, Moscoso, A Ermida y Calvos, donde la cuadrilla de apresamiento capturó 62 equinos en colaboración con los comuneros y personal municipal.