El transporte público de pasajeros de la comarca miñorana se enfrenta a un duro recorte que perjudicará especialmente a los vecinos de las zonas más rurales. La Dirección Xeral de Mobilidade ha iniciado un expediente de reestructuración de la concesión a propuesta de la empresa adjudicataria, Automóviles de Tui S.A. (ATSA). La compañía ha presentado un plan de reestructuración que deja sin bus a la parroquia baionesa de Belesar y a la nigranense de Chandebrito y elimina un total de siete itinerarios en Baiona, Nigrán y Gondomar. El documento se encuentra a exposición pública en el Servicio de Mobilidade de Pontevedra, donde cualquier afectado puede presentar alegaciones.

La reorganización del servicio elimina cuatro líneas entre Baiona y Vigo. Una de ellas pasa por Panxón y dos suben a Belesar y luego se dirigen a Nigrán y continúan a Vigo por San Roque y Chandebrito. Otra conecta la villa real con la ciudad también por Chandebrito. Desaparecerán también los dos itinerarios que salen de Chandebrito, el que se dirige a Vigo por Coruxo y el que baja a Nigrán. Dejará de existir asimismo una de las dos líneas que conectan Gondomar con Vigo por A Ramallosa.

Las frecuencias más utilizadas, las que unen Baiona con la ciudad sufrirán una reorganización que eliminará buena parte de las frecuencias, aunque la compañía garantiza que pasará un autobús cada media hora entre las 7.00 y las 20.00 horas, con recorridos cada dos horas por Panxón. La empresa compromete asimismo viajes cada dos horas entre Gondomar y la ciudad y asegura que todas las líneas se reforzarán en verano.

La reestructuración obedece a motivos económicos, según justifica ATSA. La compañía asegura que, tal y como está planteado, el servicio le genera un déficit que compromete su viabilidad. Apunta así a una acumulación de pérdidas en los últimos tres años, estimadas en 300.000 euros durante el pasado ejercicio, de 179.090 euros en 2011 y 42.550 euros en 2010.

Estos resultados económicos, argumenta la empresa, responden una conjunción de factores como la crisis económica, la caída del número de viajeros -con una media de 16 por viaje-, la subida del IVA y el incremento del precio del gasóleo, de más del 202% en los últimos once años.

Respecto a las líneas de Belesar y Chandebrito, la compañía asegura que los vehículos circulan vacíos en la mayoría de las ocasiones. Sobre las de Gondomar, recuerda que los viajeros pueden tomar el bus en A Ramallosa y que disponen de otra concesión para desplazarse a Vigo.