Los marineros de Panxón se mantienen firmes en su lucha para evitar que Portos de Galicia los expulse de su lugar de trabajo de "toda la vida" , su puerto, para colocar el pantalán que dará servicio a la línea de transporte de pasajeros a las Islas Cíes y a Baiona. Lo hacen por conservar su modo de vida y porque saben que no están solos en sus reivindicaciones. En solo diez días han reunido algo más de 2.375 firmas de apoyo entre sus vecinos de la comarca miñorana, que también veían con sorpresa cómo el organismo de la Xunta les anunciaba, a través de carteles colgados por el muelle, que sus barcos deberán abandonar la lámina de agua de forma permanente para dejar espacio al catamarán turístico. Tras agradecer la colaboración de asociaciones, cafeterías restaurantes y comercios de todo el Val Miñor en la recopilación de rúbricas, las presentaron ayer en el Concello de Nigrán, acompañadas de sendas cartas dirigidas al alcalde nigranense, Alberto Valverde, y a Portos.

Ni el gobierno municipal, ni tampoco el ente de la Consellería do Mar de la Xunta se han dirigido a ellos desde que saltó la alarma hace quince días. Por eso se sienten "abandonados y cada vez más enfadados". "La indignación va en aumento porque nadie se interesa por nosotros ni tenemos información de ninguna clase", aseguraba ayer el portavoz de los marineros, José Manuel Varela.

Conciliación de intereses

Así que el contenido de las misivas es contundente. Al regidor de Nigrán le manifiestan su "profunda indignación y cabreo con su actitud porque, obedeciendo órdenes de sus superiores, es capaz de enfrentarse a los intereses de sus propios vecinos en beneficio de una naviera". Y a Portos, le exigen que paralice el proyecto con el fin de conciliar los intereses de los pescadores, los viajeros y la empresa que gestione su transporte marítimo. Para ello, reiteran, será necesaria la ampliación del espigón con el fin de habilitar espacio protegido de los temporales para todos. Insisten en que no están en contra de la colocación de los pantalanes para la ruta marítima, pero esta "no podrá desarrollarse sin el dique de abrigo", comprometido inicialmente por Portos y paralizado a finales del pasado año por falta de presupuesto.

Se sienten "engañados" por el alcalde. "Cuando supimos que se iba a poner en marcha la línea de pasajeros, nos reunimos con Alberto Valverde y nos dijo que no habría ningún problema. Ahora Portos nos echa y ni siquiera se pone en contacto con nosotros", lamentan.