Las últimas horas de un atleta de matadero

Tame, el conocido ya como "toro de Porriño", sigue en el matadero industrial de Frigolouro a la espera de su sacrificio. Tras alcanzar popularidad en unas horas por haber huido del matadero, el animal pasó tranquilo las horas posteriores a su captura, el martes al mediodía. Desde hoy puede ser sacrificado, al transcurrir 48 horas de la administración de los sedantes, según informaron los veterinarios, ya que es tiempo suficiente para que el organismo del animal expulse los restos de la medicina.

Mientras los profesionales esperan, aparecieron diversas peticiones de indulto salidas desde organizaciones ecologistas, protectoras de animales y antitaurinas de toda España. Una de ellas, la organización ecologista "Amigos da Terra" considera la huida del animal una anécdota pero espera que sirva para "reflexionar" ya que "el toro de Mos tuvo el valor y la dignidad de intentar escapar valerosamente, un gesto de dignidad por el que merece el indulto".

Pero la petición de indulto de Tame no solo procede de organizaciones gallegas sino del resto de España, que piden en sus páginas web que se envíen cartas al Concello de Porriño por e-mail, pidiendo que el animal sea indultado.

El toro fue trasladado el martes al matadero después de haber sido capturado en el monte de A Veigadaña (Mos) con la ayuda de sedantes administrados con un rifle lanza dardos por un veterinario al servicio del zoológico de A Madroa.

Tras ser sacrificado su carne se distribuirá en mercado local, al precio habitual. Los consumidores pueden conocer la procedencia del material si solicitan la trazabilidad de la carne.