Los dos atropellos ocurridos en pleno centro urbano baionés el pasado martes han vuelto a poner de manifiesto que la seguridad vial en la principal arteria de comunicación del municipio –la PO-552, de titularidad autonómica– precisa mejoras. El alcalde de Baiona, Jesús Vázquez Almuiña, explicó ayer que el Concello, para llevarlas a cabo, "hace tiempo" que está en conversaciones con la Consellería de Infraestruturas, que proyecta reformar las rotondas actuales de la avenida urbana de Sabarís y construir dos nuevas con el objetivo de aminorar la velocidad media a la que circulan los vehículos.

Vázquez Almuiña, que lamentó los dos accidentes que en pocas horas se produjeron el martes en las calles Monterreal y Ramón y Cajal, indicó, sin embargo, que esta "no es la zona donde se concentra el mayor número de accidentes", sino que los puntos negros son, sobre todo, la rotonda de Isolina y la salida de la autopista AG-57 en la avenida urbana de Sabarís, dos lugares donde la Xunta proyecta actuar de forma "inminente", apuntó el regidor.

En este sentido, recordó que la consellería "ya ha llevado a cabo a la licitación provisional del proyecto de remodelación de la salida de la AG-57 y de su entorno, que está pendiente de algunas modificaciones puntuales sugeridas por los vecinos".

Con respecto a la rotonda de Isolina, el alcalde señaló que la intención de la Xunta es curvar el vial a la entrada desde Sabarís para "corregir la tendencia de los vehículos a continuar por inercia en línea recta hacia el interior de la glorieta".

La tercera de las rotondas actuales, situada en la conocida como "curva del manco", dejará de ser provisional, avanzó Jesús Vázquez Almuiña, después de un periodo de prueba que dura desde el principio del verano.

Entre las previsiones de mejora de la seguridad vial en el casco urbano también se contempla, según el alcalde, la construcción de un cuarto paso circular en el entorno de Villa Rosa, con el fin de frenar el flujo de vehículos procedente de Baredo hacia el centro.

Otra de las posibilidades que se plantearon en las conversaciones con la Consellería de Infraestruturas fue colocar pasos de peatones elevados en algunas zonas. "La Xunta no es muy partidaria de esta solución", comentó el regidor baionés, aunque el Ayuntamiento confía en que se ejecute en el paso de cebra de Areas, "uno de los más peligrosos", señaló.

En cuanto al eje que dibuja la PO-552 a lo largo del centro urbano (desde la avenida de Monterreal, pasando por Elduayen y Ramón y Cajal), no se ha previsto por el momento ninguna actuación, aunque el alcalde asegura que se ha instado a Autoestradas a reforzar los indicadores de entrada y salida de la autopista que, desde hace algunos meses, sirve como circunvalación gratuita al municipio entre Baredo y Sabarís para que sea empleada por un mayor número de conductores.