El atropello de un peatón de 91 años el pasado martes en Chapela, cuando cruzaba por el paso de cebra situado junto a la rotonda de acceso a la AP-9, ha encendido la alarma de los vecinos de la parroquia ante la escasa seguridad vial en este punto.
Los residentes de la zona ya habían advertido en distintas ocasiones al Ministerio de Fomento y al gobierno local del peligro que supone este punto de la Avenida de Redondela por la elevada velocidad a la que circulan los vehículos, la carencia de aceras en uno de los laterales y la escasa iluminación. "Llevamos advirtiendo del riesgo para los peatones desde que se construyó la glorieta, e incluso se convocaron varias manifestaciones de protesta para reclamar un incremento de la seguridad vial, pero lamentablemente desde Fomento no atendieron nuestras protestas", destaca Francisco Puch, uno de los integrantes de la Asociación de Afectados por la Rotonda que se creó a finales de 2002, cuando se ejecutaron las obras de la rotonda en la Avenida de Redondela.
En agosto del pasado año los vecinos del barrio de Igrexa, en el que se ubica la rotonda, volvieron a reclamar al departamento de Carreteras que aprovechase las obras de ampliación del puente sobre el río Maceiras, situado en las inmediaciones del centro de salud, para reforzar la seguridad vial en la rotonda de acceso a la AP-9, aunque tampoco en aquella ocasión les hicieron caso.
Los residentes de la zona exigen la instalación de un semáforo regulado con pulsador en el paso de peatones para obligar a parar el tráfico, puesto que se trata de un vial muy transitado. Además plantean una mejora en la iluminación tanto del paso de cebra como de la rotonda para mejorar la visibilidad nocturna en la zona, una de las mayores carencias.
Otra de las demandas es que se complete la acera en el margen derecho de la carretera en sentido Vigo –delante de un edificio en obras paralizado desde hace años– hasta la rotonda y que en el acceso a la autopista se pinte un paso de peatones también regulado por un semáforo. Además solicitan que mejore la acera en el lateral de la glorieta, en el lado opuesto al acceso de la autopista, donde se ubica un almacén de alfombras. En este lugar se encuentra una rampa de acceso a las instalaciones con un firme irregular que dificulta el tránsito de los peatones con carritos de bebés o de personas en sillas de ruedas.
Por último, los residentes de la Avenida de Redondela advierten de la elevada velocidad por la que circulan algunos vehículos, por lo que plantean la instalación de bandas sonoras reglamentarias en los accesos a la rotonda.
