Su consumo no es habitual en la comarca miñorana, pero se agota en pocas horas en su degustación gastronómica. El erizo de Mougás volvió a triunfar entre los asistentes a la sexta edición de la Festa do Ourizo, que organizan la asociación de vecinos de la parroquia del municipio de Oia con la colaboración de la Agrupación de Ouriceiros de la Cofradía de Pescadores A Anunciada de Baiona. El millar de raciones previstas duraron menos de lo esperado ante la avalancha de asistentes, que se vieron obligados a echar mano de otros manjares.

Y es que el erizo de mar es un plato casi de sibaritas por su intenso sabor marino y su textura, pero los menos aficionados a su gusto marino y su color anaranjado tuvieron alternativa, ya que la carpa colocada en el puerto de Mougás contaba también con otros platos como empanadas de distintos gustos e incluso varios tipos de postres.

El éxito de la convocatoria era merecido. El medio centenar de personas que colaboraron con la organización de la cita gastronómica empezó a trabajar la tarde del miércoles para descascarar los erizos destinados a los revueltos y a las empanadas, dos de las recetas que los comensales pudieron apreciar. Tampoco faltaron las raciones de erizo al natural, cocido y asado a la brasa, con los correspondientes pan y vino y con la opción incluso de acompañarlo de “bola na sartén”.

La música tradicional amenizó la velada bajo la carpa colocada para la jornada, que se convierte ya en una cita ineludible y se consolida como promoción del consumo del producto, más apreciado en el norte de Galicia, en Asturias e incluso en países asiáticos.