La conselleira de Política Territorial de la Xunta de Galicia,_María José Caride, inauguró ayer la mejora de la carretera Virxe do_Camiño-Mosende (PO-342), entre los municipios de Tui y_Porriño, en los que la Xunta invirtió 5,5 millones para mejorar siete kilómetros. También inauguró el enlace de Atios, en el que la Xunta invirtió 3,3 millones.

La carretera de Tui a Porriño cuya mejora entró en servicio ayer coincide en buena parte de su recorrido -a lo largo de sus primeros 2,1 kilómetros a la salida de Tui- con el trazado del Camino Portugués a Santiago, por lo que las obras que se realizaron tuvieron en cuenta esta singularidad. Así, fue construida una senda peatonal paralela a la carretera y separada de ella al largo de toda su longitud, que puede ser utilizada con un mayor grado de seguridad tanto por los peregrinos como polos propios vecinos de la zona. En el diseño de esta carretera también se tuvo en cuenta que transcurre por una zona de interés ambiental, por lo que se cuidó especialmente la integración paisajística de las actuaciones y se incorporaron barandillas de madera en parte de su recorrido que sirven, a su vez, de barreras de protección de los viandantes.

Según explicó la conselleira, junto con esta actuación ahora rematada, la Consellería de Política Territorial está a atacar el refuerzo del firme de la carretera Mosende-Chenlo (PO-343). Esta vía puede considerarse como un ramal de 2,5 kilómetros de la anterior y da servicio a las parroquias porriñesas de Mosende y Chenlo. Con esta actuación, que requiere de una inversión de 165.000 euros y que estará rematada en un mes, quedan arregladas las dos carreteras de titularidad autonómica.

Con una inversión menor pero una de gran demanda, entro en servicio el enlace de Atios con la Autovía O Porriño-Tui (A-55) para el tráfico procedente de Salvaterra de Miño con dirección a Vigo.

Tal y como explica la propia consellería, hasta ahora, el movimiento que tenía que realizar el tráfico procedente de Salvaterra de Miño, Salceda de Caselas y parte de la zona industrial del Porriño para entrar en la autovía en dirección norte exigía una complicada maniobra, consistente o en recorrer 200 metros en dirección sur, pasar por el polígono industrial y volver a dirigirse cara el norte, o atravesar el casco urbano del Porriño.

Para solucionar este problema se construyó un nuevo ramal que permite la incorporación directa en la Autovía en dirección norte y que incluye un puente sobre la N-550 y la vía del ferrocarril. Esa nueva estructura se diseñó con el gálibo adecuado para permitir el paso del tráfico industrial de la zona.