El grupo municipal socialista de Baiona justificó ayer la demora en la construcción del nuevo enlace de la autopista en Sabarís en la presencia de un camino medieval que discurre por la zona de trabajo. La existencia de este elemento patrimonial obliga a la Consellería de Política Territorial a replantear el proyecto y añadir "un puente" que permita esquivar el sendero histórico.
Sin embargo esta explicación, ofrecida ayer en el pleno por el portavoz local del PSOE, Rafael Lores, no convenció ni al gobierno local ni al BNG, que sacaron adelante una moción del PP y Coalición Miñorana (CMÑ) en la que instan a la consellería a que ejecute en Baiona las obras del proyecto de interconexión del Val Miñor por autopista con la misma celeridad con la que ya se realizan en Gondomar y Nigrán.
Ángel Rodal, portavoz del Partido Popular, explicó que hasta el momento "sólo se ha hecho una pequeña tala de árboles", extremo que confirmó Xosé Enrique Fernández, del BNG, quien aseguró que también se han realizado labores de explanación del terreno.
Más contundentes en sus intervenciones fueron el portavoz de Coalición Miñorana, Manuel Vilar, y el propio alcalde, Jesús Vázquez Almuiña, que mostraron su inquietud acerca de la intención del Gobierno autonómico con respecto a las obras.
"Posiblemente no se hará el enlace en Sabarís", apuntó Vilar, que consideró el camino medieval una "disculpa" para no acometer los trabajos, "a los que seguirán dando largas", aventuró.
Por su parte, Vázquez Almuiña encontró en la justificación aportada por el grupo socialista "una razón más que añadir a las dos hipótesis que ya contemplaba: que la empresa (Autoestradas de Galicia) esté realizando primero las conexiones de Nigrán y Gondomar porque serán de peaje y le reportarán beneficios directos o que, sin más, la Xunta pretenda aislar a Baiona", explicó.
El portavoz municipal del PSOE, Rafael Lores, consideró "exageradas" las cautelas expuestas por los socios de gobierno, aunque con sus explicaciones no consiguió frenar la adopción del acuerdo.
PXOM
Además del pleno, las fuerzas políticas baionesas celebraron ayer una nueva reunión de la comisión de seguimiento del Plan Xeral, la primera tras la aprobación inicial del documento, que está en exposición pública para alegaciones. Julio Adán, responsable del equipo redactor del PXOM, abordó los aspectos que requieren una revisión según el último informe de la Dirección Xeral de Urbanismo.
Los grupos, que coinciden en que los nuevos requerimientos "no son insalvables", mantendrán una reunión en enero con el director xeral para perfilar las modificaciones precisas.
