A pocos metros del mar y con las mejores vistas. Todavía quedan fincas vacías de este tipo en Baiona y el Plan Xeral de Ordenación Municipal optimiza sus posibilidades urbanísticas, pese a los intentos de los gobiernos por acabar con la especulación inmobiliaria en espacios protegidos y costeros. Se trata de dos áreas de reparto situadas a unos cien metros del mar, junto a la playa de A Ladeira, que presentan una edificabilidad de bajo más tres plantas y bajo cubierta. La Dirección General de Costas se contradice ante ambas propuestas, por lo que la polémica está servida.

El área de reparto número 7 se sitúa en la llamada finca de A Parra, junto al edificio Atlántico. Los pisos se ubicarían a escasos cincuenta metros de la orilla del mar y el informe de Costas sobre el Plan Xeral asegura que el complejo previsto invade la línea de servidumbre de la demarcación marítimo terrestre. Al mismo tiempo, el organismo del_Ministerio de Medio Ambiente deja fuera de su dominio este futuro inmueble en una actualización de los deslindes. El concello recibió el lunes unos nuevos planos del litoral del municipio, en los que la línea de protección se mueve hacia el mar.

Lo mismo ocurre con el área de reparto número 5, ubicada en la calle Areas. Según el informe del ente estatal y de Política Territorial, las edificaciones ocupan terrenos de Costas, pero la nueva delimitación las deja fuera.

La actualización de los deslindes de Costas será incluida en el plan como una alegación, según señala la concejala de Urbanismo, quien muestra cómo la línea de protección se mueve en torno a diez metros en el casco urbano de Baiona y hasta veinte metros hacia el mar en Sabarís.