Eva González / A GUARDA
La Fundación las Samaritanas abre una etapa a la esperanza, materializada en ayudas destinadas a afrontar la obra necesaria para el funcionamiento del centro abierto en Salcidos (A Guarda), dedicado a la reinserción de personas necesitadas, con distintos niveles de pobreza. "Pedimos la ayuda económica de personas generosas y sensibilizadas con la problemática social de estos enfermos, la mayoría jóvenes, que han perdido las facultades e intentan su recuperación para normalizar su existencia". Así se expresa la presidenta de la Fundación, la hermana María del Carmen Colmenero.
Hace dos días que el centro recibía la licencia de actividad concedida por el Concello de A Guarda. La misma presidenta actuó de guía poco después para que la vicepresidenta de la Diputación Provincial, Teresa Pedrosa; Miguel Español, primer teniente alcalde de A Guarda; y la concejala de Asuntos Sociais de O Rosal, comprobasen la realidad del servicio que se presta en la gran casona de Las Mercedes, donde actualmente se atiende a unas nueve personas, número reducido en previsión a la disposición de espacio para las obras que se van a iniciar.
La labor que se desarrolla, de día y de noche, cuenta con un grupo de personas voluntarias y, además, la Fundación tiene el apoyo del Obispado de Tui-Vigo.
Teresa Pedrosa, durante su recorrido, se interesó por el funcionamiento de la institución y atendió la petición de residentes que en persona le solicitaron programas de formación en materias de cocina e informática, comprometiéndose a conceder uno de ellos, debido a que estamos a "final de curso", dijo. Además anunció que ayudará económicamente en el desarrollo de la obra, cuya primera fase asciende a 109.999 euros.
María del Carmen Colmenero manifestó a los visitantes la gran ayuda que supone para el centro las aportaciones que vienen recibiendo del Banco de Alimentos de Vigo.
