El punto limpio de Gondomar, sin inaugurar tras casi tres años desde su construcción, empezará a funcionar en el plazo máximo de un mes. Así lo avanzó ayer el concejal de Medio Ambiente, Antón García, después de que la Corporación diese su visto bueno en el pleno al texto normativo que regulará la gestión de esta instalación, que permitirá depositar directamente los residuos domésticos que no se recogen a domicilio, como plásticos, metales, madera, pilas, aceites usados, disolventes, muebles o electrodomésticos, entre otros.

Ubicado en Vincios, en una parcela de 2.000 metros cuadrados por la que el concello paga 12.000 euros anuales a los comuneros, el punto limpio se pondrá en marcha inicialmente con un horario de atención al público de tres horas diarias (de 16.00 a 19.00 horas), excepto los sábados, que abrirá por la mañana, de 10.00 a 14.00 horas.

El texto también fija el límite máximo que por persona es posible depositar en la instalación, aunque, según indicó el concejal de Medio Ambiente, "no se trata de algo estricto, puesto que lo que queremos es potenciar al máximo la utilización del punto limpio por parte de los ciudadanos".

Para ello, Antón García anunció que el concello iniciará próximamente una campaña de publicidad y concienciación vecinal acerca de los beneficios de este sistema de gestión de los materiales de desecho. La iniciativa se completará además con "una serie de charlas informativas en las parroquias sobre el tratamiento global de los residuos", explicó el edil.

El ayuntamiento debe ahora decidir cuál será el modo en que se gestionará el punto limpio de Gondomar, financiado por la Consellería de Medio Ambiente por un total de 252.653 euros. Según García, el gobierno municipal ya ha emprendido negociaciones con las empresas adjudicatarias de servicios de limpieza en la localidad para que una de ellas asuma la gestión la nueva instalación.

El reglamento propuesto por el gobierno local fue respaldado únicamente por el Partido Popular, ya que tanto el PSOE como el independiente Manuel Núñez Sestelo (Movegondomar) criticaron que su contenido "no va más allá de una declaración de intenciones", indicó Sestelo.

Ambas formaciones concluyeron en que la "poca" capacidad de los contenedores del punto limpio y del "elevado coste que tendrán los portes del material" desde la instalación, que únicamente se destina al depósito y separación de materiales, hasta las plantas de reciclado.