El proyecto para la ampliación del abastecimiento de agua a O Morrazo desde Vigo es ya una realidad. El documento, que fija en 7,3 millones el coste de las obras de la segunda tubería que unirá el depósito vigués de O Casal y el moañés de A Ameixoada a través de la ría, llegó ayer al Concello de Moaña, que deberá tomar una serie de acuerdos previos a la licitación por parte de Augas de Galicia. El ente público dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, que financiará la nueva red al cien por cien, fija en 15 meses su ejecución, por lo que debería estar operativa en 2009.

Así pues, antes de la salida a concurso de las obras, cuyo presupuesto de ejecución por contrata asciende a 7.327.901,62 euros, la corporación municipal de Moaña deberá aprobar en pleno el proyecto, así como la solicitud a la Xunta de la financiación del cien por cien de los gastos previstos. Tras ese acuerdo plenario, el proyecto será expuesto al público por un plazo de veinte días hábiles, para a continuación poner a disposición de Augas de Galicia los terrenos y las autorizaciones administrativas de cara a la ejecución de las obras, según explicó ayer el alcalde Xosé Manuel Millán.

El proyecto contempla la construcción de un primer tramo de tubería en Vigo de 2.590 metros que partirá del depósito de O Casal -132.000 m3 y cota 136- y que descenderá por Teis hasta Guixar, donde se iniciará el tramo sumergido, de 3.449 metros de longitud y 50 centímetros de diámetro, hasta el muelle de O Con, en Moaña. Desde esa zona partirá otra nueva tubería de 2.761 metros y que discurrirá por García Arenal, Camiño Vello y PO-551 hasta A Pandiña, para tomar el cruce hacia O Casal y de ahí ascender al depósito de A Ameixoada, de 3.000 metros cúbicos y situado en la cota 113.

La nueva tubería está pensada para suministrar a 100.000 habitantes en un horizonte de 50 años y en la temporada de verano, y al igual que la línea de suministro actual al depósito de Coiro en Cangas, que alcanza los 150 litros por segundo, la que está proyectada hasta A Ameixoada tendrá unos registros similares. Así, el caudal estimado por los técnicos es de 153 litros por segundo, con una velocidad en el tramo terrestre de 0,96 metros por segundo y de 1,21 en el tramo submarino.