Aunque en un principio se creyó que uno de los delfines varados en la costa miñorana podía ser Gaspar, el delfín solitario que desde hace varios meses recorre los puertos gallegos, esta posibilidad quedó totalmente descartada cuando a las pocas horas fue localizado en Rianxo.

Pero por si alguien albergaba aún alguna duda, el propio animal se acercó el domingo, dos días después, a la bahía baionesa ante el asombro de quienes lograron observarlo.

El ejemplar, un macho de más de tres metros de longitud y 400 kilos de peso, se encuentra "en buen estado de salud", indicaron desde Cemma, que confirmaron que presenta unas "pequeñas heridas en la parte anterior del cuerpo causadas por los mejillones al navegar cerca de los muros del muelle".

"Embajador"

El modo de actuar de Gaspar, recuerda Cemma, es algo poco frecuente en su especie. Se aisla voluntariamente de sus congéneres y presenta un comportamiento "permisivo" ante la presencia humana, señala, por lo que recibe el apelativo de solitario y también de "embajador".

A pesar de ello los expertos recomiendan mantener el mínimo contacto con ellos para perturbarles.