Las notas de final de curso

El Celta cierra una sobresaliente campaña con una pro puesta fresca y afilada y un plantel de sesgo canterano, con acertada mezcla de descaro y experiencia, al que Giráldez ha sacado el máximo provecho

Partido Getafe-Celta, con victoria celeste y entrada en Europa.

Partido Getafe-Celta, con victoria celeste y entrada en Europa. / Marta G. Brea

Vigo

El Celta ha cerrado su mejor campaña en nueve años con Claudio Giráldez al frente. Con una revolucionaria gestión de la plantilla y una propuesta fresca y afilada, el louriñés se ha convertido en el primer técnico de la casa en llevar al equipo celeste a Europa en la centenaria historia del club. Lo ha conseguido con un plantel repleto de canteranos con idónea mezcla de veteranía y juventud que ha rendido a las mil maravillas ante cualquier rival y en todo escenario. Giráldez ha exprimido el talento de cada jugador y lo ha puesto al servicio del grupo para firmar una sobresaliente obra coral de la que prácticamente todos han sido y se sienten partícipes.

Porteros: Entre luces y sombras

Vicente Guaita (5)

Dueño y señor de la portería, el rendimiento del valenciano en su último año como celeste ha estado claramente por debajo del firmado la pasada temporada. Si sus paradas fueron el pasado curso claves para la consecución de la permanencia, en este ejercicio se han echado de menos intervenciones que salvasen puntos para el equipo. Campaña de claroscuros, con alternancia de errores y aciertos. Concluye contrato el 30 de junio y el club ya piensa en un relevo para la portería.

Iván Villar (5)

El aldanense cumplió el expediente en los cuatro partidos de Liga iniciales y firmó también buenos partidos en la Copa del Rey, pero tuvo que conformarse con estar otra temporada a la sombra de Guaita. Jugó los cuatro primeros encuentros ligueros (hasta que Guaita se recuperó de su lesión en el hombro) y los cuatro de Copa, incluido el del Bernabéu.

Defensas: Solidez y proyección

Mingueza (8)

El versátil carrilero catalán ha concluido el curso como máximo asistente del equipo (6 pases de gol), función que ha redondeado con 4 tantos. Ha sido también el futbolista más utilizado por Giráldez (2.734 minutos repartidos en 34 partidos, 31 como titular), que lo ha alternado en ambas bandas con muy convincentes prestaciones. Decisivo en el último pase, su elevado rendimiento y capacidad creativa con la pelota lo han abierto las puertas de la selección y le han valido la convocatoria de Luis de la Fuente para la fase final de la próxima Liga de Naciones.

Carreira (7)

El lateral vigués se ha ganado a pulso la renovación que el Celta quiere ofrecerle. Repescado por Giráldez durante la pretemporada, ha ido creciendo en la temporada sin desentonar del buen ritmo del equipo a medida que el técnico le ha dado oportunidades, con notables prestaciones por ambas bandas, profundidad en el juego y eficacia en los centros al área contraria. Giráldez lo quiere abordo el próximo curso.

Javi Rodríguez (8)

El jugador revelación del Celta esta temporada. Con ficha del filial todo el curso, el zaguero poiense se ha asentado con regularidad, buen rendimiento y goles en el perfil derecho de la experta línea de centrales que completan Starfelt y Marcos Alonso. Rápido, seguro en la marca, buen cabeceador e inteligente para rectificar errores propios y ajenos ha dado también fiabilidad al equipo en la salida de balón. En el radar de Santi Denia (fue incluido en la prelista de la selección sub 21 del mes de noviembre), no ha debutado de momento con el segundo equipo nacional. Tras la enorme temporada firmada con el Celta, su ausencia en la lista para el Europeo de Eslovaquia 2025 resulta sorprendente. La próxima temporada contará con ficha profesional.

Manquillo (5)

Comenzó el curso como parte de la rotación para la línea de centrales, pero su participación fue decreciendo con el paso de las semanas hasta desaparecer por completo de las convocatorias después del mes de enero, en gran medida debido a sus problemas físicos. El madrileño ha achacado con la boca pequeña su falta de protagonismo a un desencuentro con Giráldez que el técnico ha negado.

Starfelt (8)

Gran temporada el central sueco en el eje de la línea de centrales. Sumamente fiable por alto, ha brillado tanto en el achique como en la marca, aportando una mucha seguridad al juego defensivo. Ha sido un baluarte por alto y un consumado especialista en conjurar el peligro en los centros laterales al área. Se ha mostrado especialmente efectivo en los momentos en los que peor lo estaba pasando el equipo. Un baluarte para el Celta.

Marcos Alonso (9)

El MVP de la temporada. Desde su misma llegada, el madrileño disipó toda duda sobre la idoneidad de su fichaje tras su ostracismo en el Barcelona con un rendimiento superlativo. Dominador de todas las facetas del juego, su fiabilidad para sacar la pelota e inteligencia táctica en los momentos complicados ha sido un lujo que el Celta difícilmente se habría podido permitir de no haber llegado rebotado de su anterior equipo. Todo un referente para sus compañeros de zaga, a los que ha dado tranquilidad y contagiado su buen hacer. Aunque el gol lo ha esquivado más de lo que lo ha merecido, Alonso ha contribuido también con buenas ideas a la creación de juego en el último tercio del campo y se ha mostrado infalible desde el punto de penalti. El Celta, con buen criterio, se ha apresurado a renovar su contrato hasta 2026, con idea de ampliar su vínculo con el club al menos hasta 2027.

Carlos Domínguez (7)

Un tanto oscurecido por el abrumador rendimiento de sus competidores de zaga, el vigués ha ido de menos a más en una temporada en la que Giráldez lo ha empleado de modo intermitente. Domínguez ha cumplido con creces cuando se la ha necesitado y su rendimiento ha crecido en los últimos partidos de la temporada, cuando han faltado Starfelt o Marcos. Una pieza fiable, pese a que le ha faltado algo de continuidad, que ha dado buen nivel tanto en el perfil izquierdo como en el centro de la línea de tres, actuando como cierre.

Yoel Lago (7)

El último de los cachorros de A Madroa a quien Giráldez ha dado galones en el primer equipo. Defensa sumamente agresivo a la par de limpio ha asumido con sorprendente naturalidad el cambio de Primera RFEF a Primera División sin dejarse intimidar por las grandes estrellas o en los grandes escenarios de LaLiga con actuaciones muy prometedoras en Montjuic o el Bernabéu y solventes marcajes a estrellas planetarias de la talla de Robert Lewandowski o Kylian Mbappé.

Ristic (5)

Lateral del gusto de Giráldez, que seguramente le habría dado mayor protagonismo de no haber sufrido el serbio un calvario de lesiones que le han impedido tener un mínimo de continuidad. Cuando ha estado bien para jugar, Ristic no ha desentonado en una posición en la que ha tenido duros competidores, mostrando interesantes dotes defensivas sin renunciar a incorporarse al ataque.

Mediocentros: El corazón del equipo

Damián Rodríguez (6)

Canterano revelación del pasado curso, el pontareano ha tenido que lidiar este curso con problemas personas (la enfermedad y fallecimiento de su padre) que le han restado protagonismo durante algunos meses. El gran momento de forma del tándem formado por Beltrán e Ilaix en el tramo final de temporada no le ha ayudado a tener más regularidad. Le ha costado retomar el ritmo, pero ha dejado buenas sensaciones por su buen desplazamiento de balón y visión panorámica del juego.

Jailson (-)

Las lesiones han condicionado también la temporada del brasileño, que empezó en la rotación de la línea de tres, pero no tardó en desaparecer del mapa competitivo. Cuando ha estado disponible, Giráldez lo ha empleado como central y, ocasionalmente, como medio centro, sin mucho tiempo para el lucimiento.

Beltrán (8)

Con 230 partidos como celeste en Primera División a sus espaldas, el joven pero incombustible centrocampista vallecano está a 6 de alcanzar al gran Alexander Mostovoi como el tercer jugador del Celta con más partidos en la máxima categoría tras Iago Aspas y Hugo Mallo. Empiece el curso como titular o suplente, siempre acaba jugando y esta temporada ha sido seguramente la mejor de las siete que lleva en el conjunto celeste. Beltrán ha aportado solidez al medio campo y fiabilidad al juego con y sin pelota, además de buenos goles. Se ha compenetrado a las mil maravillas con Ilaix, con quien a formado una de las parejas de pivotes más solventes del campeonato.

Ilaix Moriba (8)

Otro de los fichajes que ha despejado muy pronto cualquier duda sobre su falta de protagonismo en equipos anteriores con un rendimiento excepcional. Medio centro vivaz, de imponente físico y zancada larga ha dado energía al centro del campo y vuelo al juego ofensivo celeste. El guineano cubre muchos metros, pisa al área rival con facilidad y posee un potente disparo de media distancia que ha ensayado esta temporada con mejor intención que fortuna. Con razón Giráldez lo quiere en nómina la próxima temporada.

Hugo Sotelo (6)

Uno los veteranos de la nueva generación de canteranos que pide paso en el Celta. Seguramente el más talentosos de los medio centros del plantel, sobre todo en el último tercio del campo, aunque esta temporada le ha faltado algo de regularidad para asentarse como titular. Ha alternado buenas actuaciones con otras menos celebradas. Se sigue esperando mucho de él porque tiene calidad de sobra.

Delanteros: Goles y desequilibrio

Hugo Álvarez (7)

Puro talento, el ourensano ya esbozó en el tramo final del pasado curso con Giráldez lo mucho que puede ofrecer al Celta en Primera División por calidad técnica, pericia con la pelota y capacidad creativa en los metros finales. Inició el curso con excelentes prestaciones y mantuvo buenos números hasta que una inoportuna lesión de rodilla frenó abruptamente su rendimiento, restándole protagonismo en el último tercio de la temporada. Pese a este paréntesis final acaba el ejercicio con 4 goles, 3 asistencias y más 1.500 sobre el verde y la sensación de que tiene sobrada capacidad para dar mucho más al Celta en un futuro inmediato.

Cervi (4)

Su cotejada profesionalidad y carisma en el vestuario contrastan con las expectativas incumplidas a lo largo de sus cuatro temporadas en el Celta. Descartado por Giráldez en verano, su empeño por seguir en nómina no ha tenido reflejo en el campo. Solo ha jugado cuando no ha quedado más remedio y no ha aportado grandes soluciones más allá del trabajo, su mayor virtud.

Williot (7)

Nuevo paso al frente en la emergente carrera del joven atacante sueco, esta temporada ya como uno de los habituales de la rotación en el perfil izquierdo del frente ofensivo. Williot cierra el curso con 4 goles y 5 asistencias, pero sobre todo se aprecia un notable crecimiento y un peculiar don para hacer que ocurran cosas inesperadas en los últimos metros de terreno. Su capacidad para agitar los partidos de la nada le valieron la etiqueta de revulsivo que este curso ha compaginado como buen desempeño como titular.

Alfon (7)

Repescado por Giráldez en verano cuando tenía pie y medio fuera del equipo, como Carreira y Pablo Durán, el manchego ha mostrado sobradas condiciones como para tener una carrera importante en Primera División, hasta el punto de convertirse en un de los atacantes más desequilibrantes y fiables del equipo en el último tercio del campeonato con goles (cierra el ejercicio con 5) claves para la clasificación europea. El próximo curso jugará con el Sevilla, que se ha anticipado al Celta para ficharlo, antes de que el club celeste cerrase su renovación.

Pablo Durán (7)

Otro de los «fichajes» que Giráldez se trajo del Fortuna. Dotado físico portentoso y una fe inquebrantable en sus posibilidades, su obsesivo afán por mejorar lo ha convertido en un atacante sumamente útil para el Celta, demostrando que la Primera División no solo le viene grande, sino que puede hacer cosas importantes en este equipo. Cierra su primera campaña en la élite con 4 goles y 4 asistencias y la sensación de que su techo futbolístico está lejano.

Iker Losada (4)

Repescado a préstamo del Betis en el mercado de invierno para suplir la baja de Douvikas, el catoirense no ha convencido en los cuatro meses largos que ha estado a las órdenes de Claudio Giráldez. Le ha faltado determinación y acierto para aprovechar las oportunidades que le ha dado el técnico.

Fer López (7)

La última de las perlas canteranas en incorporarse al primer equipo ha dejado detalles más que suficientes como para pensar que puede ser uno de los grandes referentes del Celta en un futuro cercano. Lo tiene todo para convertirse en el sucesor natural de Iago Aspas: físico, calidad técnica, comprensión del juego, creatividad, desequilibrio, pegada… Su mayor problema son las altísimas expectativas que ha generado, que Claudio ha tratado (sin conseguirlo del todo) de refrenar. El próximo curso tendrá ficha con el primer equipo.

Borja Iglesias (8)

Su fichaje, pese a que muchos consideraban que estaba de vuelta, ha sido uno de los grandes aciertos de la planificación deportiva. De la mano de Claudio, con Aspas a su lado, el compostelano ha demostrado que la excelente relación que desde hace años mantiene con el gol permanece intacta. Borja concluye la temporada como máximo artillero del equipo (11 goles) y un ejemplo a seguir para los jóvenes valores del vestuario. Se ha ganado a pulso que el Celta pelee duro por hacerse con sus servicios de forma permanente.

Iago Aspas (8)

Seguramente su mayor virtud esta temporada ha sido asumir un papel, el de revulsivo, que otrora no habría aceptado de buen grado. Pero su talento es inabarcable y su ambición insaciable. Lo ha demostrado este curso dosificando sus minutos en beneficio del equipo, consciente de su intuición para aparecer en los momentos decisivos justo cuando más se le necesita. Su gol al Getafe para certificar la clasificación europea es la síntesis de lo que ha sido su temporada. Un acto de justicia poética que le permitió cumplir la promesa que hizo cuando el Celta cayó eliminado en Old Trafford y el colofón perfecto a una temporada que pasará a los anales del club. Felizmente, le queda al menos otro año de cuerda.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents