El Celta añora al mejor Mingueza

El Celta añora al mejor Óscar Mingueza, el futbolista que guio al Celta en el arranque liguero con un juego deslumbrante que le abrió de par en par las puertas de la selección española. El catalán sigue siendo un futbolista muy importante para Claudio Giráldez, pero ha dejado de ser decisivo. Su influencia en el ataque celeste ha caído de forma evidente de un tiempo a esta parte.

Mingueza se mantiene, con 5 pases de gol, como el máximo asistente del Celta, pero dio su última asistencia el pasado 19 de octubre, durante la visita del Real Madrid a Balaídos. En la jornada anterior, en el Estadio de Gran Canaria, el barcelonés dio también el pase decisivo a Borja Iglesias que proporcionó a los de Claudio Giráldez el que hasta ahora ha sido el único triunfo a domicilio esta temporada.

En los dos meses anteriores, Mingueza había sido, junto a Iago Aspas, el futbolista más influyente del Celta con 2 goles y 3 asistencias en las cuatro primeras jornadas. Gol y asistencia en el triunfo logrado en la tercera jornada en Balaídos contra el Valencia, que repitió en la siguiente jornada (aunque esta vez no sirvió para puntuar) contra el Villarreal en La Cerámica, más otro pase de gol en la derrota en el Sadar frente a Osasuna (jornada 4).

Semejante arranque liguero le valió su primera convocatoria con la selección absoluta. Luis de la Fuente convocó al céltico en el mes de septiembre para los partidos de clasificación para la fase final de la Liga de Naciones de la UEFA ante Serbia y Suiza y volvió a citarlo para los duelos contra Dinamarca y Serbia en el parón de octubre, aunque el debut oficial de Mingueza con la Roja no se produjo hasta el mes de noviembre, con la clasificación de España ya resuelta, ante Suiza. Queda por ver si De la Fuente vuelve a convocar al futbolista celeste para los cuartos de final de la Liga de Naciones que enfrentará al combinado nacional con el de Países bajos los próximos días 20 y 23 de marzo.

Por lo que respecta estrictamente al Celta, los últimos meses de competición de Mingueza han estado marcados por el interés mostrado por importantes equipos del continente en hacerse con los servicios del futbolista en el pasado mercado invernal. Grandes equipos europeos, como el Milan o el Leizpig, pero sobre todo el Aston Villa de Unai Emery preguntaron al Celta por su situación. No llegaron ofertas en firme, pero en la Calle del Príncipe temieron hasta bien avanzado el mes de enero que el conjunto de Birmingham se llevase al jugador por las bravas pagando su cláusula de rescisión.

El rendimiento de Mingueza se vio lastrado además por la tarjeta roja con que el futbolista barcelonés fue sancionado a finales de enero por llamar “chulo” al árbitro al final del partido contra el Athletic en Balaídos, sanción que le obligó a perderse los dos siguientes compromisos ligueros contra el Alavés y el Valencia. Reapareció sin mucho lucimiento frente al Betis e inició en el banquillo el último duelo contra el Atlético en el Metropolitano. Giráldez recurrió a él antes del descanso para dotar al equipo de un plus creativo con el que vencer la firme resistencia defensiva armada por Diego Simeone tras quedarse con diez por la expulsión de Pablo Barrios.

La del Metropolitano fue la segunda suplencia de Mingueza, que ha sido titular en 19 de los 20 encuentros de Liga en que ha participado esta temporada. Se ha perdido apenas tres, en la séptima jornada, por lesión, contra el Atlético y los citados contra el Alavés y el Valencia por sanción. El barcelonés contabiliza en la competición regular 1.632 minutos sobre el verde, lo que le sitúa como el segundo jugador de campo en número de minutos del plantel, tras Carl Starfelt, que suma 1.716.

Pero a diferencia del central sueco, que ha actuado casi siempre en el eje de la línea de centrales, el catalán ha sido una especie de navaja suiza para Giráldez, que lo ha empleado en ambas bandas con diferentes matices tácticos. Su posición principal ha sido la de carrilero derecho (14 partidos), pero con frecuencia se ha movido también por el carril izquierdo (7 partidos) y no ha sido tampoco extraño verlo intercambiar su posición con el carrilero del flanco contrario, bien con Hugo Álvarez o últimamente con Sergio Carreira.

El viernes el Celta regresa a su fortín de Balaídos con la idea de hacer bueno el empate obtenido la pasada jornada en un campo tan complicado como el Metropolitano. Recibe a Osasuna, que viene de empatar con el Real Madrid y encadena 5 jornadas sin perder, en un partido en el que Giráldez va a volver a necesitar de la mejor versión de Mingueza.