Fútbol | Primera RFEF

El Nástic maniata al Celta Fortuna

Un gol a balón parado y el oficio tarraconense acaban con la racha celeste en casa | Jones tuvo las mejores ocasiones en el arranque | El filial reclamó un penalti en la prolongación

Una jugada a balón parado en Balaídos. |  José Lores

Una jugada a balón parado en Balaídos. | José Lores

Natxo Cabaleiro

CELTA FORTUNA,

NÁSTIC, 1

CELTA FORTUNA: Marc Vidal, Gael Alonso, Meixus (Sergio Díez, min.46), Manu Fernández, Garriel, Tincho (Angelito, min.60), Miguel Román, Hugo Burcio (Antañón, min.80); Johan Guedes (Iago Barreiros, min.76), Óscar Marcos y Jones El-Abdellaoui (Jordi Escobar, min.46).

NÁSTIC: Varo, Migue Leal, Gorka, Antonio Leal, Joan Oriol (Junca, min.46), Jaume Jardi (Marc Fernández, min.87), Gorostidi, Montalvo, Víctor Narro (Concha, min.74), Antoñín (Pol Domingo, min.87) y Pablo Fernández (Jiménez, min.62).

GOLES: 0-1, min.24: Antoñín.

ÁRBITRO: Jaime Ruiz Álvarez (Asturias). Amonestó por los locales a Meixus, Tincho y al técnico Fredi Álvarez y por los visitantes a Montalvo, Gorostidi y Antoñín.

INCIDENCIAS: Vigésimo segunda jornada Grupo 1 Primera Federación. Abanca Balaídos. Cerca de 1.000 espectadores.

El filial céltico quería mantener su buena línea como local y sumar su cuarto triunfo consecutivo ante su afición. Y lo pretendía con una doble intención dadas las escasas diferencias en la tabla entre la zona de privilegio y los puestos complicados. Porque los tres puntos servían para abrir hueco con la zona de descenso y, al enfrentarse a un rival directo, acercaban más a los vigueses al play off de ascenso.

Sin embargo, una acción a balón parado y el oficio de los visitantes en la segunda mitad evitaron ambas cosas y en la prolongación se esfumó incluso la posibilidad de sumar al menos un punto al no señalar penalti el árbitro en un derribo de Gorostidi sobre Óscar Marcos dentro del área.

Desde el pitido inicial el conjunto de Fredi Álvarez salió dispuesto a mandar en el partido, haciéndose con el control de la posesión. De hecho, apenas habían transcurrido dos minutos del encuentro cuando el noruego Jones El-Abdellaoui, incorporación invernal que alternará el primer equipo con el Fortuna, dejó su carta de presentación. Un recorte seco y un potentísimo disparo que se marchó rozando la escuadra de la portería defendida por Varo.

Unos minutos más tarde sería también protagonista el debutante, aunque en esta ocasión le pudo el individualismo al finalizar con un disparo excesivamente cruzado un veloz contragolpe en el que Johan y Óscar Marcos esperaban el pase de la muerte.

El Nástic, por su parte, también daba muestras de su peligrosidad al aprovechar Antoñín un despiste de la defensa local para ganar la espalda de los centrales y probar fortuna con un disparo que se marchó fuera.

Después del vertiginoso comienzo, el partido se enfrió. Los visitantes apretaban de inicio arriba pero en cuanto el Celta Fortuna superaba esa primera línea de presión juntaban líneas casi en la frontal del área sin conceder espacios a los pupilos de Fredi Álvarez.

El filial céltico tenía el balón pero no acababa de concretar la posesión en ocasiones de gol. Todo lo contrario sucedió con el Nástic. Porque cuando el dominio local era más intenso, los catalanes encontraron la solución a sus problemas en el balón parado. Así, en un saque de esquina Antoñín encontró el hueco para cabecear al fondo de la portería de Marc Vidal y lograr el gol que acabaría decidiendo el partido.

Con el marcador a favor, los visitantes se reafirmaron en su apuesta inicial, prestando ahora también mucha atención a que el Celta Fortuna no pudiese realizar ninguna transición rápida, cortando cualquier intento con una oportunidad falta.

Además, tampoco renunciaban a salir rápido al contragolpe en las pocas ocasiones en las que conseguían hacerse con la posesión de balón. De hecho, a diez minutos para el descanso, el Nástic pudo aumentar su renta en un balón largo en el que de nuevo Antoñín le gana el cuerpeo a Meixus para plantarse solo ante Marc Vidal. Pero el portero céltico evitó el tanto con una pierna salvadora y en el posterior rechace detuvo sin problemas el lanzamiento centrado de Pablo Fernández.

El filial, por su parte, pudo igualar el partido antes del descanso en una buena acción colectiva culminada con un disparo de Tincho taponado en el último instante por un defensa.

La segunda mitad fue muy distinta. El Nástic consiguió enfriar el partido, que no tuviera ritmo ninguno, y ahogó el esperado empuje inicial de los vigueses con constantes interrupciones y pérdidas de tiempo ante la permisividad de un árbitro que luego prolongaría el partido sólo tres minutos.

Además, ahora los visitantes no renunciaban a tener la pelota en posesiones largas cada vez que tenían ocasión, terminando de desactivar por momentos al Celta Fortuna al obligar a los locales a un esfuerzo extra para recuperar el balón.

El tiempo pasaba y los intentos de Fredi Álvarez de variar el guión introduciendo modificaciones desde el banquillo apenas tenían la repercusión esperada. Una acción individual de Miguel Román deshaciéndose de todos los rivales que le salieron al paso estuvo a punto de cambiarlo todo. Pero el disparo final del mediocentro salió muy centrado y lo detuvo Varo sin excesivos problemas.

De este modo se llegó al tiempo de prolongación y a la jugada polémica del partido, la acción que pudo haber permitido al Celta Fortuna rescatar al menos un punto. Pero el colegiado no señaló el punto de penalti en una acción de Óscar Marcos dentro del área en la que cayó al suelo embestido por Gorostidi. El árbitro mandó seguir el juego y poco después decretaba el final del partido y el de la racha de triunfos consecutivos en cada del filial céltico.

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