Gabri Veiga elige Balaídos para una pedida de mano con 'afouteza e corazón'

El jugador llevó a su novia y a su familia al estadio del Celta en el día de Navidad para prometerse en matrimonio

Gabri Veiga pide matrimonio a su novia Carla en Balaídos

Carla Ads

M. R.

A falta de fútbol en Balaídos, bueno es el amor. Gabri Veiga, canterano del Celta de Vigo y actualmente en las filas del Al-Ahli saudí, volvió al estadio que le vio dar el salto a la élite para protagonizar uno de los momentos más especiales de su vida. El centrocampista organizó una pedida de mano sorpresa a su novia Carla en pleno césped del estadio vigués, con permiso del club, aprovechando el día de Navidad.

La pedida no escatimó en detalles ni emoción. Entre globos blancos y celestes —los colores del Celta, siempre presentes en la vida de Gabri a pesar de llevar año y medio fuera—, la pareja se sentó frente a la pantalla gigante de Marcador para ver un vídeo lleno de palabras de afecto que el futbolista había preparado para la ocasión. Mientras Carla miraba emocionada, familiares y amigos iban apareciendo por detrás hasta el momento culminante: Gabri hincó una rodilla, sacó el anillo y lanzó la gran pregunta. La respuesta fue un «sí» inmediato, seguido de un romántico beso y los aplausos de sus seres queridos. Entre tanto, sonaba de fondo «ADMV» de Maluma, una canción que seguro tendrá un significado especial para los dos.

Horas después de este momento tan entrañable, fue Carla quien compartió por Instagram todo lo que había sucedido en Balaídos para hacer partícipe a todos sus seguidores de su felicidad: «Mi mejor regalo de Navidad va a ser pasarme la vida a tu lado. Sí siempre». Y la publicación pronto se empezó a llenar de mensajes de cariño para los prometidos, entre ellos de expompañeros de Veiga en el Celta como Fran Beltrán, Sergio Carreira, Miguel Rodríguez, Iker Losada, Lautaro de León, Diego Pampín o Fernando Medrano.

La elección de Balaídos como escenario para este momento tan importante no pasó desapercibida entre los aficionados celestes, que no pierden la esperanza de volver a ver a Gabri Veiga vestido de celeste algún día. El jugador dejó el club en el verano de 2023 para fichar por el fútbol saudí en un traspaso millonario, pero su vinculación sentimental con el Celta sigue intacta. Otras pruebas de ello son todas las ocasiones en las que el porriñés ha regresado a la que fue su casa en los últimos meses. Siempre que puede acude al palco de Balaídos para seguir los partidos del equipo y cuando sufrió la última lesión que le tuvo apartado de los terrenos de juego se volvió a Vigo para recuperarse. Además, en una entrevista publicada el pasado noviembre en FARO, el centrocampista reconoció que «volver al Celta es una ilusión, no le pongo fecha pero va a suceder».

Gabri Veiga finaliza contrato con el Al-Ahli en junio de 2026, cuando ya habrá cumplido 24 años. Hasta entonces, los rumores sobre su posible regreso a Vigo continuarán alimentando la ilusión de los aficionados, especialmente tras gestos como este, que confirman que Balaídos sigue siendo parte esencial de su vida.

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