Hugo Mallo, en su adiós al Celta: "Es el peor día de mi carrera"

Hugo Mallo forma ya parte de la historia del Celta. El capitán se ha despedido esta tarde del club en el que entró siendo un crio y que deja después de disputar 449 partidos, 309 de ellos en Primera División. "Es un día triste, el peor de mi carrera", ha afirmado en una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por el presidente, Carlos Mouriño.

El lateral de Marín, del que se barajó su salida en el pasado mercado de invierno, ha explicado que llevaba tiempo sopesando la decisión de marcharse. "Era lo mejor para todos después de 14 años aquí, en los que hemos disfrutado y sufrido", ha explicado. También ha comentado que en su momento el club frenó su salida, pero él quería ayudar para liberar masa salarial.

Mallo se ha referido al Celta como su "familia", que le ha visto "crecer y pelear". "Algún día volveré", ha aseverado y ha bromeado con echará de menos las "collejas" del presidente y de Atilano. También ha dado las gracias a todos los estamentos de club por haber confiado en él. "Si algo es el Celta es una familia y es hora de reconocer a sus empleados el trabajo que hacen entre todos".

No ha querido el ya excéltico comentar cuál será su destino y se ha limitado a apuntar que busca un "desafío nuevo". Ha señalado que ahora se irá de viaje con su familia y luego decidirá. Sobre la mesa, al parecer, tiene las opciones de reencontrarse con Eduardo Coudet en el Atlético Mineiro y de probar suerte en el fútbol estadounidense. Quizá le espere un último duelo con Leo Messi.

La rueda de prensa la abrió Mouriño. "Es un gran día porque despedimos a uno de los grandes y un día triste porque se va uno de los grandes". El presidente ha aludido a Mallo como un "jugador irrepetible y un excepcional ser humano". Pidió para él un gran aplauso, que los asistentes al acto le ofrecieron.

También tomó la palabra Manu Rodríguez, jugador del juvenil, que lo ha definido como ejemplo para todos los chicos de la cantera.