La afición ya se ha pronunciado. Más tres mil aficionados celestes convocados por el Celta a través de su página web han elegido al que se considera ya el mejor once de su centenaria historia. La iniciativa, promovida por el club y Estrella Galicia, uno de sus principales patrocinadores, ha tenido una gran acogida entre la afición durante las tres semanas que han durado las votaciones. La votación se realizó entre 40 jugadores históricos seleccionados por el club por su posición en el campo y se han elegido los más votados entre los diferentes onces propuestos por los aficionados.

La elección de mejor portero ha recaído en Santiago Cañizares, primer Zamora de la historia del club y uno de los artífices de la clasificación para la final de la Copa del Rey disputada en 1994 en el Vicente Calderón que el Celta perdió en la tanda de penaltis. El guardameta manchego entra el once a pesar de que solo militó dos temporadas en el conjunto celeste.

La defensa combina jugadores históricos con actuales, algunos de ellos fuera de su posición natural. El lateral derecho es para Míchel Salgado, referente de la cantera en tiempos difíciles para la gente de casa y emblema del gran Celta europeo de finales de los 90 que triunfó luego en el Real Madrid.

El eje de la línea se la reparten el argentino Fernando Cáceres, gran central del Celta que asombró por los campos de Europa de la mano de Víctor Fernández y Miguel Ángel Lotina, y Hugo Mallo, actual capitán y jugador de la historia con más partidos en Primera División (300). El lateral izquierdo es para Manolo, el recordado Gran Capitán y futbolista que en más ocasiones ha defendido la zamarra del club, que también aparece desplazado de su posición natural de defensa central.

El mejor medio campo de la historia celeste lo integran los tres futbolistas que mejor encarnaron el gran Celta europeo del cambio de siglo. Los rusos Alexander Mostovoi y Valeri Karpin, responsables de tantas tardes inolvidables, y el gran Mazinho, campeón del mundo con Brasil en el Mundial de Estados Unidos 1994. Un trío imbatible cuyo inmenso talento será difícil de igualar en los próximos 100 años.

Puro talento atesora también la tripleta elegida para la delantera, que conforman Manuel Fernández, Pahiño, histórico goleador del Celta en la década de los 40; Vlado Gudelj, el gran artillero del Celta en los primeros 90 y principal artífice de la final copera del 94; y el que muchos consideran como el mejor jugador de la centenaria historia del Celta: el incomparable e irrepetible Iago Aspas.