Betis 3 - 4 Celta

Pellegrini pide una sanción para Aspas por su "deslealtad imperdonable"

El delantero del Celta recibió en el encuentro ante el Betis un violento golpe del defensa Luiz Felipe, por lo que este acabó expulsado | El técnico criticó la sobreactuación del moañés

Aspas se queja de un golpe en la cara. Pellegrini, cabizbajo ayer. Luiz Felipe, tras ser expulsado.

Aspas se queja de un golpe en la cara. Pellegrini, cabizbajo ayer. Luiz Felipe, tras ser expulsado. / Agencias

El partido de ayer entre el Betis y el Celta celebrado en el Benito Villamarín se afeó en los compases finales. Durante más de 100 minutos, se presenció una exhibición de fútbol total con siete goles y dos remontadas, contienda que se acabó llevando el conjunto celeste por 3-4. En el ocaso del encuentro y con escaso tiempo para reaccionar, los nervios le pudieron tanto a la afición como a algunos futbolistas béticos. En uno de los lances, Luiz Felipe corrió hacia Iago Aspas para quitarle el balón que este retenía entre sus manos propinándole un violento golpe en el brazo que fue sancionado correctamente con tarjeta roja para el defensa ítalo-brasileño previa revisión en el VAR. La parroquia local criticó la sobreactuación de Aspas, que sí existió, al tirarse al suelo quejándose de un impacto en la cara que no sucedió. Tras el duelo, el entrenador del conjunto sevillano, Manuel Pellegrini, reprendió en rueda de prensa la actitud del moañés: "Es una deslealtad repudiable y tiene que ser sancionado exactamente igual como lo es la persona expulsada".

"Lo que hay que mejorar es que los jugadores dejen de simular y de engañar. Me parece de una deslealtad imperdonable. LaLiga tiene que mejorar la falta de lealtad de los jugadores al gritar, al hacerse los golpeados...", pronunció Pellegrini en una conferencia de prensa marcada por un ambiente hostil tras sumar su segunda derrota en los últimos tres partidos. El técnico fue más allá y, lejos de censurar el gesto de su propio futbolista, reclamó una sanción para Aspas porque en "cualquier imagen" se ve que "no le toca en la cara". "Luiz Felipe va con todo el brazo, quizás con impulso, a sacarle el balón de la mano, se la golpea y (Aspas) se agarra la cara como si le hubiera golpeado en la cara", abundó.

El colegiado, Carlos del Cerro Grande, señaló en el acta del choque que Luiz Felipe fue expulsado por "golpear con su mano en el pecho de un adversario de manera violenta cuando el balón no estaba en juego". Además, precisó que "el jugador que recibió dicho golpe tuvo que ser atendido, pudiendo continuar con normalidad". Nada reflejó de los cánticos lamentables y denunciables proferidos desde el graderío contra Iago Aspas y el celtismo tras la polémica acción.

Las palabras del también ingeniero no calaron bien entre los aficionados del Celta ni tampoco entre un sector de la afición verdiblanca que no acepta excusas arbitrales como uno de los argumentos para explicar la situación deportiva actual. Los seguidores vigueses mencionaron en redes sociales otras maniobras del juego de ayer en las que futbolistas locales sí golpearon en el rostro a sus adversarios, como fue la protagonizada por Nabil Fekir, que le paseó la mano por la cara a Luca de la Torre en uno de los momentos postreros.

"A Pellegrini también le han reprochado en las últimas horas, todavía con más vehemencia, su opinión sobre la política chilena de los últimos años"

Al hilo de lo sucedido, a Pellegrini también le han reprochado últimamente, todavía con más vehemencia, su opinión sobre la política chilena de los últimos años que mostró en una entrevista al diario ABC antes de la semifinal de la Supercopa de España. En ella, justificó el golpe de Estado llevado a cabo por militares en 1973 para derrocar a Salvador Allende. "En 1970, cuando entré a la universidad, vino el gobierno de Salvador Allende, el primer presidente comunista elegido democráticamente. En esos tres años, el país sufrió una catástrofe total”, expresó primero para más tarde indicar: “Luego vino un golpe militar, que siempre son lamentables, pero en ese momento gran parte del país entendía que había que hacer algo porque de lo contrario íbamos camino de una guerra civil”.