A Gabri Veiga hace tiempo que se la augura un gran futuro en Primera División. Pocos sospechaban, sin embargo, hace solo un par de meses que el centrocampista canterano iba a desempeñar esta temporada un papel tan importante en el Celta. Una docena de partidos (solo la mitad de ellos como titular) han destapado al porriñés como una de las grandes sensaciones del campeonato. Luis Enrique ha tomado nota y lo ha incluido en la lista previa de 55 futbolistas seleccionables para el Mundial.

Su importancia en el Celta se ha vuelto esencial en una posición “neurálgica” en el esquema de Coudet que hasta el pasado curso ocupaba un jugador de tanta jerarquía en el conjunto vigués como Denis Suárez. El técnico celeste probó primero con Óscar Rodríguez (elegido inicialmente para cubrir la vacante del salcedense), situó luego a Tapia y acabó entregando los galones a Veiga, que ha respondido del mejor modo posible: 3 goles y 1 asistencia en menos de 500 minutos sobre el terreno de juego. El Chacho quería correr prisa con Veiga, cargar a un chico de solo 20 años con la responsabilidad de liderar el juego en el último tercio de cancha, pero la realidad es que por números, talento natural y aporte futbolístico el porriñés se ha convertido en el segundo futbolista más importante del plantel tras Iago Aspas.

La tarjeta roja recibida en Almería sacará al joven canterano de la circulación durante al menos un partido en un momento especialmente delicado para el técnico. Coudet tendrá que elegir para medirse a Osasuna entre Óscar Rodríguez y Renato Tapia para reemplazar a un novato que en solo un par de meses se ha vuelto indispensable.

El Celta presenta alegaciones a la tarjeta roja para reducir el alcance del castigo

El Celta ha presentado ante el Comité de Competición alegaciones contra la tarjeta roja mostrada por Carlos del Cerro Grande a Gabri Veiga durante el partido de Liga disputado el pasado sábado en el Power Horse Stadium de Almería. La redacción del acta arbitral no deja apenas margen para que la tarjeta y el consiguiente castigo que conlleva sea revocada. Del Cerro escribió que el centrocampista celeste fue expulsado por “pisar a un adversario intencionadamente a la altura de la tibia, empleando fuerza excesiva. Estando el balón en juego, pero no a distancia de ser jugado”, lo que podría conllevar una sanción de dos encuentros de suspensión que dejarían a Veiga fuera de juego durante los dos importantes partidos que restan hasta el parón liguero. El Celta cuenta con la tarjeta será confirmada por Competición, pero el objetivo del recurso es conseguir una rebaja de la sanción y que el futbolista pueda estar al menos a disposición del técnico para el compromiso liguero del próximo 11 de noviembre contra el Rayo Vallecano. El club argumenta que no hubo intencionalidad en el pisotón, que se produjo en disputa de la pelota, además de que Gabri Veiga carece de antecedentes en este tipo de acciones.