El Celta Juvenil debió esforzarse al máximo para derrotar por la mínima al Oviedo, 1-0. Los asturianos llegaba a A Madroa muy cerca de los célticos, que tuvieron durante buena parte del encuentro la posesión del balón. Pero no había que arriesgar demasiado, ya que los asturianos salían con velocidad.

El buen hacer ofensivo de los jugadores entrenados por Fredi dio su premio pasada la media hora de juego, cuando Álvaro acertó su oportunidad. En la segunda parte, el Oviedo estiró líneas buscando una oportunidad que le permitiera empatar el encuentro, pero los vigueses se mostraron firmes en defensa.