La ventana veraniega del mercado futbolístico se clausuraba ayer en Países Bajos, lo que confirma la inevitabilidad del fichaje de Larsen. Pero se mantiene abierta hasta la medianoche de hoy en las principales ligas europeas. Precisamente la inscripción de Larsen en la Liga se antoja, en la previa de este esprint, como la única operación que acometerá el Celta. Queda pendiente la posible salida de Denis Suárez, improbable, y el fichaje de un último jugador en tal caso, prácticamente imposible.

A Larsen lo anuncian desde Príncipe como la última incorporación. Y a Miguel Baeza, como la última salida. El club anunciaba ayer oficialmente la cesión sin opción de compra del zurdo cordobés al Rio Ave. Fichado en verano de 2020 del Castilla por 2 millones de euros, Baeza disfrutó de cierta participación con Óscar y se quedó sin papel con Coudet. Ya fue cedido a la Ponferradina la pasada temporada. Y aunque Coudet lo empleó bastante en la reciente pretemporada, fue más como recurso ante el retraso en la llegada de nuevos delanteros que por convicción. Baeza, que ha disputado 27 partidos hasta ahora como céltico, reforzará al clásico Rio Ave, recién regresado a la Primeira Liga.

Solari estaba destinado, como Baeza, a abandonar el Celta. Así lo llegó a proclamar Carlos Mouriño. Pero nadie cuenta con su salida en estas últimas horas. Coudet mantiene su confianza en su compatriota, aunque sea como recurso solvente desde el banquillo. Ha participado en dos de las tres primeras jornadas, con un total de 61 minutos, asistiendo a Iago en el primer gol al Espanyol. La lesión de Paciencia, a expensas de cómo se aclimate Larsen, desplazará a Carles Pérez a la delantera. Con Óscar y Cervi en las bandas, Solari se postula como primer recambio para la derecha.

Así que todo se centra en Denis Suárez. Su pulso con el Celta ha llegado al límite. Todas las opciones que la directiva e incluso Coudet buscaron (Betis, Sevilla, Serie A) se han ido cayendo. Valencia o Villarreal han irrumpido en los corrillos. La única alternativa relativamente sólida es, sin embargo, el Espanyol. Pero Denis parece dispuesto a aguantar en la grada al menos hasta la apertura del mercado de diciembre e intentar forzar su salida gratuita. De esta manera, la directiva, que aseguraba que no existiría ningún problema en cuanto a cifra de traspaso o intercambio de jugadores cuando Denis acordase con alguno de sus pretendientes, habrá sido incapaz de liberar el principal sueldo de la plantilla.