El presidente del Celta, Carlos Mouriño, ha comparecido hoy (10:30 horas) ante los medios de comunicación para referirse exclusivamente a la situación de los jugadores Santi Mina y Denis Suárez, apartados del resto de la plantilla por decisión del consejo de administración.
Mina, condenado a cuatro años de prisión por un delito de abuso sexual a principios del pasado mes de mayo, volvió a trabajar el pasado 19 de mayo en la ciudad deportiva del Celta tras solicitar al club, mediante un burofax, su reincorporación a los entrenamientos porque la sentencia de la Audiencia Provincial de Almería todavía no es firme. No obstante, la dirección deportiva del Celta sólo le permite realizar la primera parte del entrenamiento con sus compañeros, ya que luego es obligado a realizar trabajo individual con uno de los ayudantes de Eduardo Coudet. En la misma situación se encuentra Denis Suárez, enfrentado a los dirigentes del club desde la pasada temporada, cuando la salida del joven Bryan Bugarín al Real Madrid provocó el divorcio con el club porque la agencia de representación del joven futbolista es la misma que la del exjugador del Barcelona.
Mouriño ha querido centrar hoy sus palabras en estos dos futbolistas y deja para el próximo lunes, 1 de agosto, el resto de asuntos de actualidad del Celta. "La situación de estos dos jugadores está afectando muchísimo a la imagen del club", argumentó Mouriño para justificar la ruptura de la política comunicativa del Celta de no entrar en controversias.
"Hay un jugador que lleva un año haciendo una gran campaña de desprestigio contra el club", dice Mouriño sobre Denis, en referencia, enumera, a sus redes sociales, informaciones procedentes de su entorno... "Tuvimos un problema con todos los jugadores que pertenecían a una agencia, entre los cuales estaba también Iago Aspas. Con todos buscamos una solución amigable", relata. "A los dos días nos dimos un gran abrazo. Todos los chicos respondieron y se quedaron con el Celta y no con la agencia de representación".
"Nos sentimos muy traicionados con aquella operación. Un jugador al que le pagamos una millonada y vende un jugador para ganar 50.000... Lo sentimos como una traición al club, a la institución y a los aficionados", sostiene Mouriño, que declara: "Le hemos pasado cuatro ofertas buscadas por nosotros, ninguna por el jugador, alguno de los cuales le pagaba más que el Celta. Uno le pagaba 12 millones de euros netos en tres años. Como beneficiaban al Celta, rechazó todas. Él dice que nos quiere forzar a que le dejemos ir libre". Asegura que ha maniobrado en ese sentido, dirigiéndose directamente a uno de los pretendientes. "No lo voy a permitir", sentencia Mouriño.
"En ningún momento está apartado del equipo. Desayuna con el equipo, come con el equipo, realiza ejercicios con el equipo... Hace más del 70 por ciento exactamente igual que los demás. Solo queda fuera cuando toca preparar un partido porque apostamos más por otros jugadores como Óscar y Veiga. Se hace la víctima, pero le ha ido bien. Ha sublevado a la afición y dice que si queremos paz social, tenemos que pasar por donde él diga", comenta Mouriño. "Denis no va a salir del Celta bajo ningún concepto si el Celta no está de acuerdo con el traspaso. Tiene unos derechos y se los vamos a respetar. Va a seguir cobrando todos los meses. Pero si está convencido de que con presiones nos va a mover de nuestra postura, rotundamente no. No entra dentro de nuestro proyecto deportivo y el contrato no pone que tenga que jugar los partidos. ¿Cuántos jugadores se quedaron sin ir a jugar partidos fuera de España? La única denuncia ha sido la de Denis. Los demás colaboran con sus clubes". Anticipa que admitirá todas las preguntas en esta comparecencia pero que a partir del lunes "será un tema pasado" y ya no habrá más declaraciones sobre Denis.
Denis afirmó que había jugadores de esa agencia que habían renovado. Mouriño lo niega: "Con Veiga negociamos muy duramente con su hermana y para nada intervino la agencia de él. Denis y su entorno, sus abogados, sus redes, están propagando desinformación. Aspas estaba en la misma condición y se arregló en el momento. Si hay buena voluntad...".
"No es un problema de arreglarlo con él. El club no tiene nada que arreglar con Denis. Hay un contrato que se va a cumplir. Él se queda y nosotros le pagamos. Su arreglo es: 'Déjame la carta de libertad y me voy libre'. Está claro que no lo voy a hacer", afirma Mouriño.
Mouriño cierra la puerta a cualquier tipo de reconciliación: "A estas alturas, no. No quiero en mi equipo a alguien que traiciona al club. Yo iré a Balaídos con la cabeza muy alta respecto a las decisiones que he tomado con Denis, aunque me haya costado algún silbido de la afición. Hemos tomado las decisiones correctas".
El 20% del tope salarial
"Entre Denis y Mina se llevan el 20 por ciento de toda la plantilla. Por supuesto que nos afecta. Nos va a obligar a no reforzar el equipo como teníamos pensado", indica Mouriño.
Jura que el jugador nunca ha hablado de dejar la agencia, "que es distinto a negociar sin la agencia". Y que además Denis nunca ha hablado con el presidente y solo una vez por teléfono con un directivo. "Claro que tiene un sueldo muy alto. Lo tenía igual cuando lo contratamos. Hicimos un gran esfuerzo para que Denis estuviese aquí. ¿Yo iba a perder ese esfuerzo por algún tipo de capricho?".
En cuanto a Santi Mina, es "un chico con condena que no es firme. Tiene su derecho a entrenar y lo está haciendo en las mismas condiciones. Consideramos que nos ha hecho un grave perjuicio. Realizaremos las reclamaciones oportunas cuando la condena sea firme. Le conseguimos dos propuestas y tampoco aceptó ninguna. Creemos que también se quiere ir libre. No podemos premiar a quien lo haya hecho mal. No le voy a pagar dos años de contrato para que luego fiche por el equipo que le conseguimos".
Respecto a que no se incluye una cláusula que protegiese al Celta de la situación de Mina, que ya estaba acusado cuando lo ficharon, reconoce: "Nos dejamos llevar mucho. Él y sus abogados nos convencen de que no había pasado nada. Nos convencen de que era una operación de extorsión. Con la ilusión de la Operación Retorno me equivoqué. Debí tomar esa precaución y me equivoqué. Pido disculpas a la afición".
"Voluntariamente no lo puedo rescindir. Le tengo que pagar todo el contrato. Le pago los tres años de contrato. Lo estoy premiando", explica sobre su negativa a rescindir el contrato de Mina. "Si le pago y se va, no puede usar ese dinero para reforzar el equipo. Igual que con Denis. La indemnización me imputaría en el tope salarial de este año".
"Con Coudet tenemos una gran relación pero hay cosas que son de club y nadie puede intervenir", comenta sobre la opinión del entrenador respecto a la situación de estos dos jugadores.
