El Granada regresó ayer a los entrenamientos para comenzar a preparar el decisivo partido del domingo ante el Celta con muchas bajas por lesión y sanción, y con muchas dudas también por el irregular estado físico de varios jugadores.

Tras el empate del pasado miércoles ante el Atlético de Madrid (0-0), el equipo granadino solo ha realizado dos sesiones de trabajo y ha descansado tres días, aunque desde ayer se ejercitará todos los días hasta el domingo de forma ininterrumpida, informó el club.

El nuevo técnico nazarí, Aitor Karanka, que solo completó un entrenamiento con su nuevo equipo antes de su estreno frente al Atlético, ha iniciado la semana con muchos problemas en su plantilla entre lesionados, sancionados y jugadores cuyo estado físico es una incógnita.Se mantienen al margen del grupo con lesiones de larga duración y se perderán con seguridad el partido ante el Celta los defensas Carlos Neva y Raúl Torrente, además del medio ofensivo Rubén Rochina. A ellos se unen, al estar sancionados por acumulación de amonestaciones, tres defensas más: Víctor Díaz, Joaquín Marín, Quini ,y el portugués Domingos Duarte.

Durante la semana se sabrá si pueden estar o no ante el Celta hasta seis jugadores más que arrastran diferentes problemas físicos.El medio francés Maxime Gonalons, el lateral Santiago Arias, el delantero Jorge Molina y el punta uruguayo Matías Arezo no pudieron tener minutos ante el Atlético de Madrid, mientras que acabaron ese choque con molestias musculares el extremo venezolano Darwin Machís y el polivalente Antonio Puertas.Todos estos problemas en forma de lesiones y sanciones han llevado a Karanka a tirar ayer de varios jugadores del filial para su entrenamiento, una situación que se repetirá durante toda la semana.

Por otra parte, el Granada hapuesto a disposición del Celta 100 localidades para los abonados que deseen asistir al partido del domingo al precio de 35 euros. El plazo para retirarlas concluye mañana, jueves.