Eduardo Coudet subrayó la importancia de sumar su segundo triunfo consecutivo en Balaídos frente a Osasuna. “Ganar en casa es importante para hacerse fuerte. Son tres puntos muy buenos ante un rival difícil, que salta líneas, que tiene muy trabajado el segundo balón, la pelota aérea. Hicimos un partido inteligente, casi no sufrimos después de hacer la diferencia”, manifestó.

El técnico celeste eludió hablar de Europa –“sólo pienso en el partido de Sevilla”– y se reafirma en su teoría de que la clasificación no refleja exactamente los méritos de sus jugadores. “Creo que antes ya habíamos hecho muy buenos partidos. Hoy tuvimos un buen tramo, hicimos la diferencia y después no queríamos sufrir, queríamos dejar las líneas cortas, que no nos centraran. El equipo sabe a lo que juega y siempre intenta sostener una idea. A veces sale mejor y otras no, pero siempre lo intenta”.

Admite que aunque sólidos en defensa, faltó mayor control del juego en la segunda mitad. “Tampoco estuvimos tan finos para generar más en la segunda parte con los espacios, pero la primera intención era no sufrir y lo hicimos bien. Hasta el partido con la Real y saco el partido de Copa, el equipo sabe a lo que juega, intenta sostener una idea en casa y fuera. Somos un equipo que por momentos dominante, que sostiene la intención. A veces sale mejor, a veces no, pero lo intentamos siempre”.

Coudet incluyó finalmente a Pineda en la convocatoria, aunque el nuevo fichaje, ya inscrito tras la nacionalización italiana de Galhardo, no saltó a la cancha. “Intentamos poner a los que mejor estaban o a los que creí que necesitaba para este partido”, comentó, sin aclarar si lo veía ya para disponer de minutos. Tampoco quiso realizar más comentarios sobre las perspectivas en el mercado, no ya de entrada (el día anterior había asumido que no habrá más incorporaciones), sino sobre la posible salida de Okay. El entrenador remitió al director deportivo, Felipe Miñambres.