El internacional mexicano Orbelín Pineda viajó durante la madrugada del día de Reyes a Vigo para cerrar su fichaje por el Celta, con el que disputará la segunda vuelta de LaLiga Santander tras finalizar su etapa en el club Cruz Azul.
El jugador azteca, que se despidió de sus allegados en el aeropuerto de la capital mexicana, atendió a los numerosos medios que se congregaron en la terminal internacional, para después embarcar junto a su mujer y sus dos hijos con los que compartirá esta nueva aventura europea.
“Es un salto que me ha dado Dios. Tenía esa previsión en mi carrera y me toca ahora. Voy a buscar un sueño”, declaró a los periodistas en el aeropuerto.
Orbelín cree que todavía puede dar “un poquito más” en Balaídos, donde se reencontrará con su compatriota Néstor Araujo, al que conoce de la selección: "He hablado con él desde el primer día que sabía que iba para allá. Le he preguntado y me ha dicho que le han tratado de muy buena manera. Ahora me toca a mí experimentar y dar lo mejor de mí.”
Con respecto al que ya es su exequipo, Pineda declaró que "me voy bien, le dejé una estrella en el escudo, y salí por la puerta de enfrente. Ahora me toca vivir una experiencia linda y bonita. Esto se hace para disfrutar, y creo que lo voy a aprovechar", auguró.
La llegada del internacional mexicano se produce unas horas después de que el Celta lograse despejar el camino para poder inscribir al que de momento es su único fichaje de invierno en LaLiga.
La obtención del pasaporte italiano por parte del brasileño Thiago Galhardo posibilita la incorporación de Orbelín Pineda que ahora solo falta que plasme su firma en el contrato que le unirá al club vigués.
