Sin exceso de confianza, consciente de la dificultad que entraña la eliminatoria y con la firme idea de seguir avanzando en una competición en la que esta temporada hay depositadas grandes expectativas, afronta el Celta los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Se mide el conjunto celeste al Atlético Baleares (Estadi Balear, 20.00 horas DAZN), uno de los cuatro equipos de Primera RFEF que siguen vivos en el torneo, y lo hace sobre aviso tras la dificultades vividas en Andorra, pero sobre todo porque la experiencia dicta que este tipo de eliminatorias suelen envenenarse y el rival ha dado sobradas muestras de su peligrosidad dejando en la cuneta en la ronda previa al Getafe.
El Celta sabe que la diferencia de categoría no siempre es una ventaja cuando la eliminatoria se dirime a partido único y en cancha ajena. A diferencia de la pasada ronda, el partido se jugará sobre hierba natural y la superficie no será un problema, pero habrá que lidiar con la ilusión de un oponente que sueña con repetir gesta y se vaciará en busca de la sorpresa frente a los aproximadamente 3.000 aficionados –el aforo del campo estará restringido al 75 por ciento– que lo arroparán incondicionalmente. “Nuestras armas son la afición y la ilusión”, certificó ayer Xavi Calm, técnico del Baleares, que promete presentar batalla. Ilusión tampoco le falta a Celta, que comparece en Palma en su momento más dulce del curso tras encadenar dos convincentes triunfos en Liga frente al Espanyol y el Betis, y la determinación de estar el próximo viernes en el sorteo de los octavos de final.
Con la visita al Reale Arena a la vuelta de la esquina, Eduardo, el Chacho, Coudet hará rotaciones. Se espera que el técnico dé descanso a varios de sus titulares con vistas al compromiso liguero del sábado contra la Real Sociedad. Pesos pesados como Iago Aspas, Javi Galán, Aidoo, Fran Beltrán, Cervi o Brais Méndez estarán previsiblemente en el banquillo. El Chacho desplegará, no obstante, un once competitivo, con titulares y suplentes entremezclados y futbolistas del filial en la formación de salida.
La buena noticia para el preparador argentino es que recupera de una tacada a cinco de los jugadores que causaron baja en la expedición que se desplazó a Sevilla al pasado domingo: Hugo Mallo, Jeison Murillo, ya de vuelta en Vigo, Renato Tapia y Thiago Galhardo. Este último recibió el alta médica durante el entrenamiento vespertino celebrado ayer en la ciudad deportiva. Coudet tiene aún algunas dudas y decidirá al once hoy mismo.
Es seguro, sin embargo, que Rubén Blanco, la apuesta del técnico para la Copa, relevará a Matías Dituro en la portería. El mosense estaría arropado por una línea de cuatro defensas en la que Kevin, ya recuperado de la indisposición estomacal que le impidió vestirse de corto en el Benito Villamarín, ocuparía el costado derecho, mientras que José Fontán relevaría en el izquierdo a Javi Galán, el futbolista de campo con más minutos sobre sus piernas esta temporada.
Por delante de la defensa, Tapia parece la opción más plausible. El peruano precedería a una línea de volantes en la que las novedades podrían ser el canterano Gabri Veiga, que ocuparía la banda derecha, y Nolito, que relevaría a Franco Cervi en el flanco izquierdo. Denis Suárez ocuparía, sobre el papel, la posición de enganche, sin descartar otras opciones como Okay o el propio Tapia, si Coudet utilizase al turco en la posición de pivote.
En la delantera, es más que probable que el Chacho dé descanso a Iago Aspas y mantenga en la formación a Santi Mina. Queda por ver si otorga la titularidad a Thiago Galhardo, cuya lesión muscular está todavía muy reciente. Las alternativas al punta brasileño son Miguel Baeza, cuya salida del club está próxima, o el juvenil Hugo Álvarez, quien ya jugó de partida en la última eliminatoria copera contra el Andorra, sin descartar la posibilidad del también juvenil Hugo Sotelo.
El Atlético Baleares, mientras, encara la eliminatoria reforzado por su buena marcha en la competición regular (es cuarto de su grupo de Primera RFEF, con claras aspiraciones de ascenso) y con la convicción de que la clasificación es posible después de haberle endosado en la anterior eliminatoria un 5-0 al Getafe. Xavi Calm, técnico blanquiazul, no podrá contar por lesión con el defensa central Iñaki Olaortua ni con el centrocampista Alfonso Martín y tiene dos bajas por COVID cuya identidad no ha sido desvelada.
