El entrenador del Real Betis, el chileno Manuel Pellegrini, lamentó que su propio equipo se pusiese “cuesta arriba el partido” perdido ayer frente al Celta, al admitir que cometió “errores desgraciados en defensa” y estuvo “espeso en ataque”.

“Hemos hecho un mal partido, que podía haber acabado 0-0, pero el fútbol es un juego de errores y aciertos, y hoy nos hemos equivocado nosotros”, manifestó en rueda de prensa Pellegrini.

Para el técnico santiaguino, “el 0-2 fue psicológico” porque llegó al borde del descanso y, a partir de ahí, “al equipo no se le pueden criticar las ganas, pero no ha tenido claridad”.

Reconoció, además, que le queda la impresión de que el Betis “podría haber jugado un día entero sin haber marcado; ha habido una falta de claridad ofensiva”.

Pellegrini subrayó que su plantel ha vivido “una semana atípica, pero el COVID no es justificación” y consideró que “a veces jugando mal se puede empatar a cero”, si bien explicó el “poco daño” que hizo el Betis al recordar que “su portero no ha firmado ninguna tapada de mérito”.

El preparador bético estima que “ninguno de los dos equipos ha hecho mérito para ganar” e insistió en que “dos errores en defensa” facilitaron el triunfo gallego, aunque ni siquiera considera “clave la jugada del 0-1” porque el suyo es “un equipo con claridad para darle la vuelta a un marcador en contra”.

“Si nos dicen que acabamos la primera vuelta con 33 puntos y en Champions, todos estaríamos felices. Habría sido mejor acabar con 36 si ganamos hoy o con 39 si lo hubiéramos hecho en Bilbao, pero no hay que dramatizar. Lo importante es ser autocríticos y tratar de repetir estos 33 puntos en la segunda vuelta”, recalcó.