El Celta cambia el registro para centrarse por un par de días en la Copa del Rey. El grupo de Eduardo Coudet regresó ayer a las viejas instalaciones de A Madroa para ultimar la preparación del choque de la segunda ronda del torneo que mañana disputará a partido único (Estadi Nacional, 19.00 horas) frente al CF Andorra, de Primera RFEF.
El plantel volvió a las antiguas instalaciones de Candeán para entrenarse en hierba sintética y aclimatarse a la superficie en la que se va a jugar el encuentro. El tipo de superficie –las dimensiones del campo son similares a las de Balaídos– será precisamente la principal dificultad que se la va a presentar al cuadro celeste en este segundo asalto copero.
La novedad en la sesión fue el retorno al trabajo de Santi Mina, ya restablecido del traumatismo craneal que le obligó a abandonar el pasado viernes el terreno de juego durante el compromiso liguero frente al Mallorca tras sufrir un balonazo en la cara del bermellón Íñigo Ruiz. El artillero participó normalmente en la sesión preparatoria en la que no estuvieron Iago Aspas, Hugo Mallo y Augusto Solari, que mañana causarán baja por lesión. El goleador céltico se recupera de una elongación muscular en el aductor con vistas al choque frente al Espanyol, al que, con suerte, podrían llegar también el capitán celeste y el centrocampista argentino, aquejados respectivamente de una rotura fibrilar en la fascia plantar del pie derecho y una lumbalgia. Los tres causarán baja mañana en la Copa.
Sí estuvieron a las órdenes de Coudet los futbolistas del filial Carlos Domínguez y Gabri Veiga, que no fueron citados por Onésimo Sánchez para el duelo liguero de ayer frente al Talavera y tendrán minutos mañana, así como los juveniles Hugo Sotelo y Hugo Álvarez, dos de los canteranos que se ejercitan habitualmente a las órdenes del técnico argentino.
Los cinco chicos de la cantera (y seguramente también el portero Coke Carrillo) completarán la citación en un duelo mucho más complicado que el de la primera ronda (que se jugó además en un escenario tan propicio como La Romareda) y que Coudet, sin descuidar la importancia del choque, aprovechará para dar minutos a los jugadores con menos protagonismo en LaLiga como Rubén Blanco, Okay Yokuslu o Miguel Baeza.
Un rival en racha con una sola derrota como local
El Celta quiere acabar esta temporada con dos años de decepciones en la Copa, una competición con la tiene desde hace largo tiempo una cuenta pendiente, y en la que el equipo vigués no brilla desde la semifinal perdida frente al Deportivo Alavés en el curso 2016-17, con Eduardo Berizzo al mando. La necesidad de dar un golpe de autoridad en LaLiga tras dos temporadas de peligroso coqueteo con el descenso impidieron el pasado curso darle a la Copa el protagonismo que la competición merecía. El grupo de Eduardo Coudet solventó con holgura la primera ronda frente al modesto Llanera (0-5), pero fue humillado en la siguiente eliminatoria por el Ibiza (que a la postre ascendería a Segunda División) en un duelo para olvidar (5-2) que deber de servir de advertencia para el compromiso de mañana contra el Andorra. No mucho mejor la fueron las cosas al Celta en la campaña precedente, con Óscar García. Bajo la batuta del sabadellense, los celestes solventaron sin demasiados problemas las dos primeras eliminatorias contra el Peña Azagresa (0-2) y el Mérida (1-4), pero cayeron derrotados en dieciseisavos de final ante el Mirandés (2-1). En las dos temporadas anteriores, el Celta fue eliminado por equipos de Primera División. La Real Sociedad lo dejó en la cuneta en dieciseisavos en el curso 18-19 y el Barcelona lo eliminó en octavos en la campaña 17-18.
Los últimos precedentes ponen al Celta sobre aviso
El Andorra es uno de los rivales más complicados que podía tocarle en suerte al Celta en segunda ronda de Copa. El equipo del que es máximo accionista el azulgrana Gerard Piqué y dirige Eder Sarabia, exsegundo de Quique Setién en el Betis y el FC Barcelona, cuenta con una de las mejores plantillas del Grupo II de Primera RFEF y se encuentra en su liga en un momento de forma realmente dulce, el mejor de la temporada. El equipo de Sarabia encadenó ayer su cuarta victoria consecutiva goleando a domicilio al Castellón, con tantos de Eudald, Nieto y Marc Fernández. Previamente, los andorranos dieron cuenta del Lienense (7-1), el Náxara, en la ronda previa de la Copa, y el Sabadell (0-1). Su última derrota la recibió el cuadro andorrano en su estadio frente al Alcoyano (1-2), el único equipo que ha logrado llevarse este curso los tres puntos del Estadi Nacional de Andorra. Las otras tres derrotas encajadas por los de Eder Sarabia se produjeron a domicilio frente a rivales de la zona alta de la tabla: el Villarreal B, segundo clasificado del grupo, el Barcelona B, séptimo, y el Albacete, que ayer desbancó precisamente del liderato al filial del submarino amarillo. El Andorra contabiliza en lo que va de curso cinco triunfos como local y ha cedido apenas una derrota y un empate en su estadio.
