Aunque el Celta aún no lo haya oficializado, se da por hecho que Orbelín Pineda pasará a formar de las filas celestes a partir del próximo mes de enero. El mediocampista mexicano acaba su contrato con Cruz Azul al fin de diciembre y desde su club y su afición ya han comenzado las despedidas. Las redes sociales se han llenado de mensajes de cariño al talentoso futbolista, además de críticas a su ya casi exequipo por no poder sacar partido alguno de su salida.

"Gracias por todo, mago. Te deseamos lo mejor en Europa. Cruz Azul y su afición te esperan con las puertas abiertas. Siempre tendrás un lugar en la historia de la máquina. Éxito, don Orbelín Pineda", rezaba uno de los mensajes. Varios de ellos coinciden en referirse a Pineda como "mago", una definición que en Vigo hasta la fecha está reservada para Iago Aspas. Habrá que ver si en su salto al Viejo Continente el jugador es capaz de mostrar su mejor nivel, que le ha llevado también a la selección de su país. En su repertorio destacan su capacidad para filtrar últimos pases y su llegada desde segunda línea; para el capítulo de anécdotas se puede reseñar su 'salsa' para celebrar los goles.

Tal como adelantó este diario, el fichaje de Orbelín Pineda, de 25 años, por el Celta se concretó el pasado mes de agosto con la idea de que el jugador se incorporase al equipo en el mercado invernal. El atacante azteca llega a coste cero, ya que concluye su actual contrato con Cruz Azul el próximo 31 de diciembre y ha desoído todas las ofertas de renovación que el club mexicano le puso sobre la mesa para dar el salto al fútbol europeo con el Celta. Pineda era libre para negociar su futuro desde el pasado mes de junio.

El fichaje del internacional mexicano es la única contratación que el Celta tiene prevista para el próximo mercado de invierno, según ha anunciado Felipe Miñambres, director deportivo del club, en una reciente entrevista con FARO. Para inscribir al jugador, no obstante, el Celta tiene que resolver un problema de exceso de cupo de futbolistas extracomunitarios. Aunque Néstor Araujo obtuvo la nacionalidad española a finales de julio pasado, las tres plazas que permite LaLiga están actualmente cubiertas por el peruano Renato Tapia, el argentino Franco Cervi y el brasileño Thiago Galhardo, este fichado después de que Araujo obtuviese la ciudadanía.

El Celta necesita, por tanto, liberar una de sus plazas no comunitarias para poder inscribir a Pineda. La opción más factible es que Franco Cervi obtenga en las próximas semanas la nacionalidad portuguesa, cuya tramitación se encuentra en fase final. Galhardo tiene también avanzados los trámites para obtener la ciudadanía italiana.