Carlos Mouriño se reafirma en las directrices marcadas al comienzo del mercado veraniego. Habrá dos fichajes que completen los cinco acordados con Coudet, tras los culminados de Cervi, Dituro y Galán. Se mantienen central y delantero como prioridades, aunque la dirección deportiva está abierta a otras posibilidades. La concreción de esos refuerzos queda a expensas de las salidas de Okay y Mor, con buenas perspectivas.

“Estamos cumpliendo las expectativas. Nos faltan dos puestos por ocupar. Estamos trabajando en ello, en la confianza de que se los vamos a dar al entrenador siempre y cuando las salidas se vayan efectuando como han ido. No tenemos duda de que se va a complementar esos dos puestos. De aquí a que se cierre el mercado estarán”, asegura con firmeza el presidente, que presume de sintonía entre Coudet y Miñambres. “Puede haber matices en los que no coincidamos y se impongan unos criterios u otros. Pero siempre de la mano”.

Con los fichajes “supeditados” a las salidas, la situación de Emre Mor y Okay ha de desenredar el nudo. Con Mor se ha incrementado la esperanza de que encuentre destino desde que ha dejado sus asuntos en manos del poderoso agente Mino Raiola, aunque los primeros intentos de colocarlo en Turquía hayan resultado infructuosos. “Tenemos noticia de que puede tener equipo, pero no tenemos ninguna oferta”, admite Mouriño, optimista pese a lo vaporoso de esos avances. “Le damos cierto valor a la noticia porque es de una persona relacionada con este tema”.

Con Okay, en cambio, existe la certeza absoluta de que su traspaso se acabará produciendo. “Estamos tranquilos. Tiene varias ofertas. Está esperando a que le salga la mejor. Tiene todo el derecho del mundo a buscar sus mejores condiciones. A nosotros nos da muchísima confianza”. Mouriño se muestra cariñoso con el centrocampista: “Okay siempre se ha portado de maravilla con nosotros. Nunca hemos tenido el más mínimo problema con él; al contrario, todo ha sido colaboración. Fue suficientemente claro y elegante para decir: ‘Oye, buscad un sustituto por si yo me voy porque tengo casi todas las posibilidades de irme’. Fue de cara, abierto, sincero. Nos dijo lo que pensaba hacer con mucho tiempo de antelación para que tomásemos medidas”.

En realidad el Celta no se plantea contratar un pivote defensivo. “No buscamos sustituto de Okay, creemos tenerlo en el equipo. Veremos qué posición cubrimos más, dependerá de la aceptación del mister a propuesta del director deportivo De salida, delantero centro y defensa central. Si nos ofrecen un jugador extraordinario en otro puesto y el entrenador dice que le puede venir bien, a lo mejor se sacrifica alguno de los otros puestos”. En el fondo late el deseo de recuperar a Rafinha, si el PSG costease parte de su ficha, aunque más como sueño que como opción.

Nacionalización de Cervi

Mouriño confirmó que Araújo “a efectos legales ya es comunitario. Falta el trámite del documento de identidad, etcétera. Está aprobada la nacionalidad por el ministerio, ya es español. ¿Cuándo puede ejercer como español? Le faltarían unos días pero es inmediato”, calcula. En todo caso, el puesto extracomunitario que libera se le dedicará a Orbelín Pineda. En Príncipe no descartan que Cervi puede acelerar su nacionalización portuguesa. La inscripción de él, Galán y Dituro en la Liga ya se ha procesado.

Con todos estos mimbres, Mouriño se sujeta a un discurso contenido en las expectativas. “Los excesos son malos. No podemos pasar de un equipo que hace seis meses estaba en puestos de descenso a procurar comernos el mundo. Creo que la afición, por algún motivo, está con mucha ilusión, igual que los jugadores y nosotros. Ahora, ponernos metas, hablar de títulos… Me resisto un poquito aunque sueño con ellos y no voy a renunciar jamás a ellos. Pero no ponerlo esta temporada como una meta y si no lo conseguimos, hablar de decepción. Dentro de esa ilusión hay que ser realistas. Debemos pensar en el equipo, en nuestras posibilidades. No pensamos pasar apuros. Cuanto más arriba, mejor”.