Se avecina una nueva confrontación entre La Liga y el Real Madrid, tras el terremoto originado por el plan de crear una Superliga europea entre los clubes más poderosos de Europa. Ahora, el conjunto que preside Florentino Pérez no parece dispuesto a aceptar el acuerdo entre La Liga y CVC mediante el cual el fondo inversor inyectará 2.700 millones de euros al fútbol español (de los que únicamente el 15 por ciento va directo a inversión en jugadores). Una entrada de capital vital, por ejemplo, para que el Barcelona intentase cuadrar números y firmar la renovación de Leo Messi que finalmente ya no se producirá. Su eterno rival se opone al proyecto promovido por Javier Tebas, presidente de La Liga, y amenaza incluso con acudir a la vía judicial.

De esos 2.700 millones de euros, una vez que se tenga el visto bueno de la Asamblea de clubes prevista para el 12 de agosto, unos 270 millones de euros corresponderían al Barcelona y 261 al Real Madrid. A priori, una buena operación tanto para unos como para otros, pero el conjunto blanco está en contra al advertir supuestas irregularidades que incluso está dispuesto a denunciar en los tribunales, según desveló ayer el Financial Times.

Según un comunicado oficial difundido horas más tarde por la entidad que preside Florentino Pérez, “los clubes tienen cedidos los derechos audiovisuales exclusivamente para su comercialización en régimen de competencia y por un plazo de 3 años. Este acuerdo, usando una estructura engañosa, expropia a los clubes el 10,95 por ciento de sus derechos audiovisuales durante 50 años y en contra de la ley”. Además, desde la casa blanca subrayan otras posibles irregularidades: “La negociación se ha hecho sin un proceso competitivo y las condiciones económicas pactadas con el fondo CVC le dan unas rentabilidades de más del 20 por ciento anual. Este mismo fondo oportunista es el que intentó sin éxito acuerdos similares con las ligas italiana y alemana”.

“El Real Madrid –se señala en la nota– no puede apoyar una operación que regala a unos inversores el futuro de 42 clubes de Primera y Segunda División y el futuro de los clubes que se clasificaran durante estos 50 años.

El Real Madrid se queja también de que ni siquiera ha sido informado al respecto. Sin embargo, el OK a este acuerdo con CVC fue unánime en la comisión delegada formada por 14 clubes entre los que no se encuentra la entidad que preside Florentino Pérez. No obstante, el golpe de efecto de Tebas parece no contar con el respaldo de uno de los principales actores de la competición, que amenaza con los tribunales.

El Real Madrid, de hecho, anuncia la convocatoria de una asamblea de socios compromisarios para poner encima de la mesa la postura oficial del club de Concha Espina ante este millonario acuerdo que deberá someterse a votación la semana que viene en La Liga.

Para que salga adelante el plan de Tebas, dos tercios de los clubes de Primera y Segunda División deben dar su apoyo a esta nueva vía de negocio, por lo que el proyecto afronta unas horas decisivas.

El Barcelona, por su parte, era conocedor desde hace al menos un mes de este acuerdo entre La Liga y CVC e incluso Laporta y Tebas se han sentado en varias ocasiones para hablar de este asunto. En el Real Madrid, sin embargo, no lo ven nada claro y piensan presentar una demanda porque creen que es irregular y que va en contra de sus intereses.