La Operación Salida avanza a mejor ritmo del esperado. En poco menos de una semana, el club vigués ha conseguido despachar a una tacada a dos de los descartes de los últimos años con la marcha de David Costas al Oviedo y la cesión del Gabriel, el Toro, Fernández, al FC Juárez, de la Primera División mexicana. Resta ahora el relativamente sencillo trámite de resolver el futuro de Okay Yokuslu, un futbolista con apreciable cartel que el Celta quiere convertir en su gran venta de este verano, y el gran problema de quitarse de encima a Emre Mor, cuya rescisión contractual negocia el club sin visos de solución inmediata.
La marcha del atacante turcodanés se ha convertido en el gran quebradero de cabeza para la dirección deportiva en el presente mercado. Más que un problema económico, la marcha de Mor, es ya para el Celta una cuestión de principios. Sin ofertas sobre la mesa y escasas opciones de que salga cedido por su evidente depreciación y elevado salario, la única posibilidad que se plantea ahora mismo el club es la rescisión de su contrato.
La cuestión es ahora el peaje que el club tendrá que pagar desprenderse de Mor. Al jugador le resta otro año de contrato y no parece que vaya a dar facilidades, pues difícilmente algún equipo va a acercarse a los 1,3 millones de euros netos que cobra en el Celta. Aunque el club celeste ha dejado perfectamente claro al jugador que la alternativa a su marcha es la grada, también parece haber asumido que para quitárselo de en medio tendrá que pagarle una parte sustancial del año que le resta de contrato.
Emre Mor lleva apartado del grupo desde el retorno del equipo celeste a los entrenamientos. No obstante, a finales de la pasada temporada, Eduardo Coudet ya dejó claro que no quería verlo delante. El mensaje del Chacho convocando para el último partido de Liga a todos sus futbolistas, incluso los lesionados, excepto a él, fue inequívoco.
Desde el pasado día 7 de julio, el exinternacional turco se ejercita (antes con David Costas y ahora en solitario) en A Madroa a la espera de que se resuelva su salida, pero a juzgar por sus comentarios en las redes la situación de marginalidad que vive no parece afectarle demasiado. En una reciente publicación en Instagram, un Emre Mor sudoroso y con aspecto fatigado, presumía de ser “feliz” en su trabajo a la conclusión una sesión solitaria de entrenamiento en la antigua ciudad deportiva celeste.
La ostentación superflua ha sido habitual estos años en el jugador, tan proclive a frases grandilocuentes que no han tenido luego traslado al terreno de juego. Este último mensaje puede interpretarse, sin embargo, como una declaración de que no va a poner fáciles las cosas.
El tercer fichaje más caro de la historia del Celta ha acabado por convertirse en su negocio más ruinoso. El paso del atacante danés por el equipo celeste ha sido una fuente inagotable de decepciones. Su bajo rendimiento, pobre actitud en los entrenamientos, y falta de compromiso (amén de diversos episodios disciplinarios) hace tiempo que han agotado la paciencia del club, harto de sus incumplidas promesas de redención.
Infelizmente, las posibilidades de colocar a Mor en el mercado se han ido reduciendo de forma exponencial a medida que el futbolista se ha ido depreciando año tras año en el Celta. Cuando el equipo celeste lo fichó en agosto de 2017 por 9 millones (más otros 4 en objetivos que no se han cumplido) la página especializada Transfermark le adjudicó un valor de mercado de 13, 5 millones. Cuatro años después, este mismo portal le asigna un valor de apenas 1,2. Ningún club ha ofrecido esta cantidad al Celta.
Denis refuerza el “stage” de Marbella
Denis Suárez se reincorporó ayer tarde a los entrenamientos con el Celta en la concentración de Marbella. El centrocampista salcedense fue la gran ausencia en la vuelta al trabajo del equipo celeste el pasado 7 de julio tras dar positivo en coronavirus en las prueba serológicas a las que el plantel se sometió unos días antes de reiniciar los entrenamientos en la ciudad deportiva. El salcedense participó en la sesión vespertina dispuesta por Eduardo Coudet. Denis Suárez ha tenido que guardar diez días de cuarentena y pasar dos pruebas PCR negativas antes de poder reincorporarse hoy al grupo en su cuartel general de la ciudad malagueña. No irá solo. Salvo que se produzca algún contratiempo en las pruebas preceptivas, se incorporarán también al grupo el delantero canterano Iker Losada y las dos últimas adquisiciones del conjunto filial, los centrocampistas Álex Carbonell y Carlos Beitia.
Emotiva despedida de David Costas
David Costas publicó ayer en las redes sociales una emotiva carta de despedida del Celta, al que el defensa del Real Oviedo considera y siempre considerará su “casa”. “Me considero afortunado de haber vestido esta camiseta desde pequeño”, confiesa el canterano con “orgullo” y la satisfacción de “haber seguido creciendo y aprendiendo” de la mano del Celta. Costas dice que inicia “una nueva etapa” en el Oviedo, pero asegura que volverá, porque “uno siempre vuelve adonde ha sido feliz”.
Sergio Carreira, a un paso del Mirandés
La salida da préstamo de Sergio Carreira al Mirandés es cuestión de horas. El lateral vigués jugará cedido el próximo curso en el conjunto castellano después de que se desbloqueasen las negociaciones con el Celta para ampliar por un año más, de tres a cuatro, su contrato con el club celeste. Las declaraciones del padre del futbolista al programa Ao Contraataque invitando a las partes a flexibilizar sus posturas para alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambos han tenido el efecto perseguido. Las negociaciones se han retomado y han avanzado de forma muy considerable en las últimas horas y el jugador podrá ver cumplido su anhelo de jugar el próximo curso en Segunda División con el Mirandés. José María Aragón, director deportivo del conjunto castellano, se mostraba ilusionado con el cierre de la operación. “Es una posibilidad que está desde el principio del verano y es una opción muy ilusionante y muy importante para nosotros. Vamos a ver si somos capaces de cerrar todo el entramado de la operación”, ha señalado. El principal punto de discordia, pues el Celta considera que la posibilidad de jugar regularmente en Segunda División puede venirle muy bien a Carreira para seguir progresando, es la exigencia del Celta de ampliar a un cuarto año su contrato. El jugador pedía doblar su ficha en este último año, a lo que el club se negaba. Finalmente parece que ambas partes han alcanzado un punto intermedio para que Carreira pueda salir cedido.
