La cantera del Celta fue protagonista el pasado fin de semana al clasificarse tercero en el torneo de LaLiga Promises, en el que participaron las canteras de los veinte equipos de Primera División, sino porque su jugador Bryan Bugarín y su entrenador Juan Recondo acapararon las distinciones individuales.

Bugarín, de 12 años, fue máximo goleador, con 9 tantos, y proclamado mejor jugador, mientras que Recondo se llevó el trofeo de técnico más destacado de una competición que se celebró en la ciudad deportiva del Villarreal. El joven técnico vigués repasaba este martes en rueda de prensa lo vivido en tierras castellonenses y apelando a la prudencia ante el gran eco mediático que generó la actuación del joven futbolista de Salceda de Caselas.

"Ha sido fin de semana muy emocionante. Los niños creo que se lo han pasado de maravilla, se han divertido mucho. Desde el primer momento les dijimos que era una experiencia única, que la tenían que vivir para disfrutarla y, sobre todo, como un grupo unido", comentó Recondo en referencia a un torneo que despertó gran interés televisivo.

A nivel deportivo, considera “un éxito” el resultado del equipo celeste: “Siempre tenemos la duda de los cuartos. Somos como España hace años. Creo que llegar y estar entre los ocho primeros del torneo a nivel competitivo es un éxito. Plantarnos en unas semifinales, un tercer y cuarto puesto y hacerlo de la manera que lo hicimos, en el último minuto, pues es brutal".

Respecto al debate abierto sobre si es positivo tratar como profesionales a futbolistas tan jóvenes, el entrenador del Celta alevín sostiene: “Es un peligro dependiendo de cómo lo enfoquemos nosotros y cómo lo enfoquen los medios. Nosotros allí éramos los mismos de siempre. Estábamos allí con los niños y ellos, tranquilos".

De hecho, Recondo se siente más formador que entrenador: “Es una de las cosas que más ha evolucionado el fútbol base en los últimos años, que cada vez la gente está más preparada tanto como entrenador como formador y es algo que creo que siempre el club ha valorado. Lo que hay que hacer es darle normalidad. Tenemos que seguir formando a todos los jugadores por igual aunque destaque uno u otro, no sabemos qué jugador puede ser el que pueda tener la oportunidad de estar en el primer equipo. A nivel formativo, nos da una gran cantidad de cosas que el día a día no nos da. En cuanto a nivel psicológico, creo que lo que hay que tener es tranquilidad. No dejan de tener 12 años. No sabemos qué va a pasar con ellos el día de mañana. Pueden tener una lesión, les puede dejar de gustar el fútbol", subraya.

Como formador, más que como técnico, Recondo insiste en que a esas edades hay que tomarse el deporte como un juego. “Lo único que tienen que hacer es disfrutar, divertirse, estudiar, ser buenos compañeros, intentar que sus padres les ayuden lo mejor posible pensando en su futuro, en que se formen pensando en ser buenas personas. Creo que esa es la clave de todo”.

Y que se llegase a comparar al pequeño Bryan Bugarín con Iago Aspas, el técnico del Celta lo considera excesivo. “Creo que es apresurarse demasiado. Entiendo que lógicamente la gente ve un torneo de este nivel y le gusta ver a su equipo del que es aficionado pues destacar así, pero es demasiado precipitado. Tienen 12 años, son niños. Lo único de lo que tienen que estar pendientes es de pasárselo bien, coger la pelota y salir a la calle a jugar, estudiar y divertirse. Si alguno de ellos está en el primer equipo o en el filial rozando las puertas estaremos encantados de verlo allí, como están ahora otros que han pasado por nuestras manos como Miguel Rodríguez, Grabi Veiga, Sergio Carreira... Eso sería espectacular, pero el camino es muy largo y muy difícil. Solo tienen 12 años y lógicamente están viviendo una experiencia única y es todo complicado. Este fin de semana se lo han pasado de maravilla, se han divertido un montón. Hasta hemos cantado villancicos antes de algún partido para quitarnos los nervios de encima y creo que eso es lo más importante, que hemos funcionado todos juntos muy bien, como un equipo”.

El Celta, que el fin de semana que viene volverá a Villarreal para disputar el mismo torneo, pero en categoría infantil, al suspenderse el año pasado por la pandemia, sigue presumiendo de cantera. “Creo que es una generación muy preparada. Creo que desde pequeños han competido muy bien y si sigue trabajando así es una generación muy buena para disfrutarla muchos años. Desde que estoy aquí han pasado muy buenas generaciones pero esta en especial está muy preparada y tenemos que intentar eso, seguir disfrutándola mucho tiempo como el buen colectivo que es”, apunta Recondo, para quien su trofeo como mejor entrenador del torneo LaLiga Promises supone un reconocimiento al trabajo de todos los entrenadores de la cantera del Celta: “Sobre todo, un reconocimiento al club. Creo que somos muchos los que trabajamos día a día en la sombra y que uno de nosotros pues es un reconocimiento a todos".

Y espera que más pronto que tarde el primer equipo esté dirigido por un entrenador de la casa: “Es algo complicado. Al final nosotros sabemos cómo funciona el mundo del fútbol y es complejo. Creo que se están haciendo las cosas bien en el club. Cada vez se apuesta más, no solo por los jugadores de base, si no por los técnicos que poco a poco van promocionando. Todo lleva su tiempo. Habrá que ver cómo va evolucionando el fútbol y lógicamente ojalá podamos tener pronto un técnico de la casa en el primer equipo”.