El Celta apunta a redondear su excelente final de temporada festejando la clausura con parte de sus aficionados en Balaídos. El Gobierno ha aprobado el regreso de público a LaLiga en las dos últimas jornadas –también a la ACB, que pronto iniciará el play off–. Es un permiso con restricciones de aforo y limitado a las comunidades autonómas en fase 1 (las de menor incidencia de la pandemia), que son por ahora Valencia y Baleares. La previsión es que Galicia acceda a este grupo de manera inmediata. De este modo, asistirán aficionados al último partido contra el Betis, fijado para el domingo 23 de mayo a las 18.00 horas. La Xunta podría otorgar un permiso máximo de 5.000 espectadores. Los datos sanitarios de los próximos días resultarán determinantes tras el último repunte de positivos en Vigo.

El ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, realizó el anuncio tras varias semanas de mensajes cruzados entre el Gobierno y el presidente de la patronal de clubes, Javier Tebas, con esperanzas y desestimaciones. “Comparecemos para explicar una decisión que hemos tomado en estos días después de escuchar a los representantes de LaLiga, del mundo del fútbol, a los representantes de la ACB de baloncesto... Quería trasladarles que vamos a volver a tener público en LaLiga y en la ACB. Lo vamos a hacer con los criterios que venimos siguiendo desde que se originó la pandemia basados en la prudencia, el buen sentido y guiados por los criterios sanitarios”, declaró el ministro en rueda de prensa.

Los estadios podrán acoger el 30% de su aforo siempre que no superen los 5.000 espectadores y solo para público local, la entrada y salida se realizará de manera escalonada y en el interior los asistentes estarán distanciados por al menos 1,5 metros. No se podrá comer ni fumar. Valencia-Eibar y Villarreal-Sevilla son los partidos de Primera en los que podría haber público este fin de semana; Elche-Athletic, Levante-Cádiz y Celta-Betis,, los del siguiente.