El Celta viene de cerrar casi matemáticamente la permanencia en Primera División por novena temporada consecutiva, con lo que se garantiza una década seguida en la élite tras su último ascenso. A ello se refirió el domingo Iago Aspas como uno de los logros más importantes del equipo que entrena Eduardo Coudet. El moañés es consciente de la dificultad de mantenerse año a año entre los mejores. De hecho, es el octavo equipo que más temporadas acumula sin descender a Segunda.

José Méndez, presidente de la Federación de Peñas.

A ese éxito también se refiere José Méndez, presidente de la Federación de Peñas del Celta, quien considera la permanencia como una especie de título para aquellos clubes que no manejan grandes presupuestos económicos. “Es una alegría inmensa”, señalaba Aspas tras derrotar a Osasuna. “Era muy importante este partido, volver a ganar después de llevar varias jornadas haciendo las cosas bien sin premio. Esos diez años en Primera son un logro para nosotros”, añadía un exultante Aspas al valorar un triunfo que lanzaba al Celta en la clasificación hasta la novena plaza, con 41 puntos, a 12 del descenso cuando restan 15 puntos por disputarse.

Moncho Carnero, ex entrenador del Celta.

Gran parte del celtismo es consciente del valor de la victoria ante Osasuna. Pero la pandemia ha impedido celebrarlo por todo lo alto en Balaídos. Así lo cree Méndez. “Ayer [por el domingo] nos privaron de una fiesta. En la pasada temporada tampoco se pudo celebrar, pero en la anterior se montó una buena fiesta tras evitar el descenso. El objetivo al principio de temporada era eludir el descenso y, a partir de ahí, lo que caiga. Y mientras no cambien las circunstancias, va a tener que ser así. Es nuestro día a día. Cuando consigues el objetivo a falta de cinco jornadas para acabar la Liga, está claro que Balaídos hubiese sido una fiesta”, insiste el dirigente de los peñistas.

Aspas, conocedor de la casi centenaria historia del Celta, sabe que en contadas ocasiones se han vivido etapas tan largas en la élite como la actual. De hecho, ya es la tercera más prolongada del club, tras las de mediados de la pasada centuria y la de entre siglos. En catorce temporadas se sitúa el récord céltico en la élite, entre los cursos 1945-46 y 1958-59. El siguiente, de doce años, lo estableció entre la 1992-93 y la 2003-04.

Distintas épocas

“La gente no lo valora mucho, no lo tiene muy en cuenta, y creo que hay que recordarlo. Sobre todo después de lo vivido en las dos últimas temporadas, de salvarse en la última jornada. Ahora, cuando faltan cinco, ya lo tienes conseguido. Hay que valorar que lleve diez temporadas consecutivas sin descender”, explica Méndez, quien se queda con el equipo actual, frente al de los éxitos europeos, por la relevancia que ha adquirido la cantera en la plantilla actual. “En aquel momento, se valoraba los fichajes, no había cantera. Ahora, por las circunstancias, casi todos tienen sus canteranos. Y ante Osasuna, el Celta salió con siete jugadores de casa en el once titular. Eso tiene mucho más valor, pero teniendo en cuenta el momento. El fútbol cambió mucho desde entonces. Cada época hay que valorarla por lo que es y por lo que se está desarrollando en la misma. No es lo mismo aquel Celta europeo que el actual”, añade el presidente de las peñas.

Moncho Carnero, quien ejerció como segundo entrenador del Celta en la época de brillantez en Europa, también descata que el equipo vigués encadene una década seguida entre los mejores clubes de la Liga. “Para equipos como el Celta es un logro importante. No es fácil mantenerse diez años seguidos en Primera División. Y el Celta sí lo ha conseguido de nuevo. En algunos de esos de esos años ha sido con apuros, pero tiene mérito y hay que dárselo”. De hecho, desde que los célticos ascendieron en el verano de 2012, solo se han mantenido hasta entonces en la élite siete equipos más: Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Sevilla, Valencia, Athletic Club de Bilbao y Real Sociedad. Ni siquiera el ahora poderoso Villarreal ha podido disfrutar de este periodo tan largo en la máxima categoría, un premio para célticos como Aspas.

Tras más años en Segunda

Se da la circunstancia que de las tres etapas más largas del Celta en Primera, ésta es la que estuvo precedida de un mayor número de años en Segunda. Cinco temporadas tardó el Celta en volver a la élite entre la primera y la segunda década del nuevo siglo. Las otras dos etapas longevas en la élite se produjeron tras pasar un año y dos, respectivamente, en la división de plata. El último largo peregrinaje por Segunda llevó al club a un cambio estructural para amortizar la deuda de los años dorados en Europa. Sin dinero, se buscó la solución en una cantera que se ha convertido en seña de identidad.

“Todo esto es un mérito para el club. No recuerdo la primera etapa más longeva en Primera porque no había nacido, pero sí la segunda, que la viví en mis propias carnes. Fue una alegría inmensa permanecer tantos años (12, entonces) en Primera División. En aquellos años también pudimos disfrutar de las competiciones europeas. Pero eso no desmerece, en absoluto, la trayectoria de estos últimos años. Todos tenemos que estar orgullosos de que un equipo como el Celta continúe tantos años en la élite”, conviene Carnero.

Menos cantera en el filial

Para el extécnico del conjunto vigués, la proliferación de canteranos en la actual plantilla “es un mérito añadido” del equipo de Coudet. “Pero tampoco le resto importancia a lo otro. Nuestra época también fue bonita. No tuvimos tanto jugador de cantera, pero en algún momento sí apareció. Recuerdo que ganamos una Intertoto con jugadores de la cantera (como Couñago, Noguerol, Jacobo Campos...); con ellos fuimos capaces de lograr ese pequeño título. Tuvieron su parte de mérito los canteranos en aquella ocasión. Ahora ejercen un papel importante y yo me alegro que la cantera tenga un papel importante, pero también la echo de menos en el filial. Sé que se ha construido un equipo filial para intentar ascender a Segunda, pero echo en falta a los jugadores de la cantera; en el equipo filial juegan muy pocos. Me gustaría que existiera esa continuidad en el segundo equipo”, subraya Carnero, para quien la permanencia del Celta en la élite también es un triunfo.