El Celta no está teniendo demasiado fortuna con las designaciones arbitrales en el tramo final del año. Si la pasada jornada frente al Getafe le correspondió en suerte el asturiano Guillermo Cuadra Fernández, con el que los celestes no han conseguido de momento ganar un solo partido, el Comité Técnico de Árbitros designó ayer a José Luis Munuera Montero para dirigir el último compromiso liguero del año el próximo miércoles contra el Huesca en Balaídos.

Munuera Montero ha sido un colegiado fatídico para los intereses del Celta en las últimas temporadas. El conjunto celeste solo ha ganado dos de los once partidos que le ha dirigido el colegiado andaluz, que ha penalizado a los celestes con arbitrajes sumamente controvertidos.

Siete partidos nada menos ha perdido el equipo vigués con este árbitro, que lo perjudicó gravemente en la mayor parte de estas derrotas. Desde su debut frente al Leganés en Balaídos (0-1) los atropellos han sido moneda de curso corriente. Así ocurrió, por ejemplo, en Ipurua, en Mestalla, con uno de los peores arbitrajes que se recuerdan en muchos años, o contra el Atlético de Madrid.

Pero no siempre los celestes han salido trasquilados con Munuera. De los últimos cuatro partidos en que ha pitado al Celta, el equipo vigués ha ganado dos (en casa al Leganés y a domicilio al Villarreal), ha empatado otro (también ante el Leganés) y solo ha perdido uno el pasado curso contra el Levante (1-3), sin influir esta vez en la derrota.