El Celta y el Elche vuelven a enfrentarse mañana en el Martínez Valero después de seis años sin verse las caras en Primera División con dinámicas contrapuestas y papeles cambiados, pues es el conjunto ilicitano, recién llegado a la máxima categoría, es el que afronta el partido con el viento a favor. Así lo creen futbolistas que defendieron la casaca de ambos equipos como Jorge Otero, Moisés García León o Jesús Perera, que consideran el choque una reválida para el técnico celeste, Óscar García, que tendrá muy complicado mantener el puesto si no gana a un adversario que tiene de su lado la confianza que dan los resultados.
“A estas alturas es un poco exagerado hablar de partidos definitivos, pero sí que puede marcar mucho, sobre todo en el Celta. Después de todo el revuelo que ha habido estos días, en los que se ha hablado poco de fútbol y mucho de cuestiones extradeportivas, parece que va a marcar el futuro de Óscar”, opina Jorge Otero, exinternacional celeste que concluyó sus días deportivos en el conjunto ilicitano.
El exdefensa nigranés considera que el conflicto entre el técnico y Hugo Mallo es un preocupante factor desestabilizador en una situación deportiva ya de por sí complicada por los malos resultados de las últimas cinco jornadas. “El ambiente está enrarecido, con reproches de unos hacia otros. Parece que no están todos en el mismo barco y es lo peor que puede pasar. Y si a eso añaden los malos resultados de las últimas jornadas hay un caldo de cultivo muy negativo. La situación complicada”, reflexiona.
El exdelantero Moisés García León, integrante del plantel que logró la segunda clasificación europea del Celta y compañero de Otero en el conjunto franjiverde, se muestra sorprendido del escaso provecho que el conjunto celeste ha sacado a la calidad que se supone a su plantel. “Los números no son buenos. Todo el mundo espera del Celta mucho más de lo que está dando. El problema es que en las dos últimas temporadas no está rindiendo al nivel que se le supone a una plantilla de calidad como la que tiene”, apunta el exfutbolista zaragozano.
El cuadro franjiverde carece del la calidad técnica del conjunto celeste, pero llega al partido cargado de confianza tras protagonizar un arranque liguero muy por encima de sus expectativas. “El Elche ha apostado por dar continuidad a parte de la plantilla y que luego ha invertido bastante en fichajes, lo que es raro tal como está el mercado. Ha cambiado de concepto, han acertado con los fichajes y están dando una imagen muy buena que les ha llevado de momento a la parte alta de la clasificación. Yo creo que ni ellos se esperaban un arranque tan bueno como el que están teniendo”, apunta.
Jesús Perera, exdelantero de ambos equipos, ve al Elche, pese a la mayor calidad y jerarquía en la categoría del equipo de Óscar García, por delante en las apuestas. “El favorito debería ser el Celta, pero tal como está ahora mismo la situación parece que es al contrario. Me gustaría que el Celta gane para que no se repitan los problemas del año pasado. Por equipo y jugadores, creo que el Celta tiene una gran plantilla, mucho mejor que la del Elche, pero las dinámicas son importantes en el fútbol y la del Celta no está nada buena”, razona Perera. El pacense añade un preocupante factor de inestabilidad al momento del equipo vigués. “Nadie contaba con el Elche sacase sus partidos con tanta facilidad y que el Celta tuviese tantos problemas. Esperemos que lo extradeportivo no le afecte y que empiece a ganar porque de lo contrario puede seguir el mismo camino del año pasado”, señala.
Virtudes compensatorias
El exdelantero pacense se muestra gratamente sorprendido por el solvente arranque liguero protagonizado por el equipo que dirige el argentino Jorge Almirón. “El Elche es un caso muy parecido al del Cádiz. Son dos equipos recién ascendidos, que saben que no cuentan con el potencial de otros equipos y lo compensan con otro tipo de cosas como la unidad, el compañerismo, el trabajo, en fin, en apoyarse en otras cosas. Al final tener un buen grupo y un equipo unido también te hace ganar partidos”, subraya. “El Elche está en una dinámica muy positiva, se encuentra con confianza y en una posición muy cómoda y no tiene la presión del Celta en tener que ganar el partido sí o sí. Esto es muy importante a la hora de afrontar un partido. Ahora mismo creo que es el favorito”, detalla.
Jorge Otero considera que uno de los grandes problemas que está teniendo en el conjunto celeste este año, como también lo tuvo el pasado, es no haber conseguido adecuar el modelo de juego a las características de sus futbolistas más talentosos. “Habría que apostar por un modelo de juego acorde a las características de tus jugadores con todas las consecuencias y esto supondría un juego combinativo, de apuesta por el balón y que haga sufrir al rival que yo no veo en el Celta desde hace mucho tiempo. Predicamos un estilo, pero no es lo que se refleja en el campo”, razona.
Pero aunque Óscar García no ha conseguido explotar el talento de sus mejores hombres dotando al equipo de un estilo definido, a juicio del nigranés, son los jugadores y no el técnico los que tienen que dar un paso al frente en este momento. “Al final los principales implicados en esto son los jugadores y a muchos de estos jugadores no se les está viendo la calidad que se les supone. Ni en el juego ni en los resultados”, destaca. Y precisa: “No es tanto perder un partido sino cómo lo pierdes. Llevamos varias temporadas con el fantasma del descenso muy cerquita y las dudas aparecen en cuanto las cosas no funcionan. Ves que el equipo no es capaz, que no tiene argumentos para sacar adelante los partidos y esto es lo más preocupante”.
Al Elche, en cambio, Otero lo ve en dinámica ascendente. “Cuando eres un recién ascendido es importante empezar bien y el Elche se está mostrando como un equipo muy unido y llega al partido en un momento fantástico”, dice.
Los exjugadores de ambos equipos coinciden en considerar el choque de mañana una reválida para Óscar García. “Desde la lejanía, creo Óscar se la juega porque es una situación que no se acaba de solucionar. Yo creo que el club espera mucho más y al final el que paga esta situación es el entrenador” , resalta Moisés García.
“Los entrenadores están continuamente en el alambre y si los resultados no se dan como uno quiere, lo más fácil siempre es que caiga el entrenador, tenga o no la culpa. Los entrenadores dependen de los resultados y cuando estos no se dan los clubes cortan siempre por el mismo sitio”, concuerda Jesús Perera.
