"Tapia también tiene muy buen juego aéreo, tanto a la hora de defender como de atacar. Le puede aportar igualmente al Celta esa faceta", comentaba días atrás Chemo del Solar en referencia a su paisano, al que augura un futuro brillante en Vigo. Sin embargo, el nuevo refuerzo del Celta fue rechazado en 2012 por el fútbol inglés, siendo juvenil, al no convencer por su estatura para jugar como defensa central. Esa era la posición en la que se desenvolvía entonces Tapia y ese fue el argumento del Liverpool para rechazar al peruano tras someterse a unas pruebas con el equipo de Anfield. El club desatendió entonces las recomendaciones de Kenny Dalglish, que entonces entrenaba a los reds.

Después de ese intento fallido de dar el salto al fútbol europeo, Renato Tapia y varios compañeros regresaron al viejo continente para presentarse ante el Twente, que acabó ofreciéndole un contrato profesional a un futbolista que ahora mide 1,85 metros y que además sobresale por el dominio del juego aéreo, además de por su labor de contención en el centro del campo. De hecho, en la liga holandesa fue elegido como mejor defensor de la primera mitad de 2018. Dalglish vio un buen futbolista en el ahora céltico, coincidiendo con lo que piensa Chemo del Solar.