El Celta afronta esta tarde frente a Osasuna (El Sadar, 17.00 horas, Movistar LaLiga) la primera de las tres "bolas de partido" que le restan por la permanencia fortalecido por el buen partido firmado el pasado martes frente al Atlético de Madrid y la confianza que proporciona no depender más que de sí mismo para seguir una temporada más en Primera División.

Aunque la victoria del Mallorca el pasado jueves ante el Levante reduce a 4 puntos su renta con la zona de descenso, el grupo de Óscar García mira al horizonte con optimismo, consciente de que puede certificar de modo matemático la salvación esta misma jornada, si es capaz de ganar esta tarde al rocoso conjunto de Jagoba Arrasate y el cuadro balear pierde mañana en su visita al Ramón Sánchez Pizjuán contra un Sevilla que se juega una plaza en la Liga de Campeones.

El duelo frente a los pamploneses supone todo un desafío para los celestes, que encaran el choque con las importantes bajas del portero Rubén Blanco y el defensa central Jeison Murillo con respecto al último partido. El portero mosense cayó gravemente lesionado en los minutos finales del último choque contra el Atlético y tiene por delante una larga recuperación, mientras que el zaguero colombiano vio el martes frente a los colchoneros la quinta tarjeta amarilla y cumplirá en Pamplona el correspondiente partido de sanción. A estas dos significativas bajas hay que sumar, también por lo que resta ya de temporada, las de Denis Suárez, con una rotura de fibras; David Juncà, con luxación de hombro, y Sergio Álvarez, éste debido a una doble fractura de menisco.

Con Sergio y Rubén fuera de juego, la portería celeste estará esta tarde en manos de Iván Villar, un portero con muy poca experiencia en Primera División, pero que ya disputó algunos minutos a buen nivel el pasado martes contra el Atlético y en quien Óscar García tiene plena confianza para estos tres partidos que faltan por jugarse.

Queda por ver si el preparador celeste mantiene esta tarde la defensa de cinco hombres eficazmente empleada el martes contra los de Diego Simeone o modifica la retaguardia desplegando una línea de cuatro para añadir un atacante (seguramente Nolito) a la ecuación ofensiva. El técnico celeste oculta, como es su costumbre, sus planes, aunque la importancia del choque y la seguridad que ha proporcionado en los últimos partidos el esquema de tres centrales parecen indicar que repetirá el dibujo empleado el pasado martes contra los colchoneros. El regreso de Néstor Araújo tras cumplir sanción contra el Atlético se lo permite, en este caso con una zaga inédita en la que Joseph Aidoo y el tinerfeño Jorge Sáenz flanquearían al mexicano. En el costado derecho Hugo Mallo, por su mayor proyección ofensiva, parece contar con cierta ventaja sobre Kevin Vázquez, mientras que el flanco izquierdo volverá a ser cosa de Lucas Olaza.

En medio campo, se esperan también algunos cambios. La principal novedad podría ser el regreso al once del croata Filip Bradaric en lugar del turco Okay Yokuslu, que descansaría frente a los pamploneses. En el equipo se mantendría Fran Beltrán, autor del golazo que dio al Celta el empate contra el Atlético. El madrileño, que ha ofrecido tras el confinamiento su mejor versión del curso, estaría acompañado en esta ocasión por Rafinha Alcántara, a quien Óscar dio descanso el pasado martes y cuya entrada en el segundo tiempo mejoró de forma considerable las prestaciones del Celta. El brasileño es el factor creativo del equipo en ataque y se antoja complicado que el técnico prescinda de él de partida durante dos encuentros consecutivos.

De nuevo Aspas

Por lo que respecta a la punta de ataque y pese a no haber descansado una sola jornada desde la reanudación de la competición, Iago Aspas se perfila de nuevo como apuesta segura por su enorme influencia en el juego ofensivo del equipo. El moañés ha sido titular en 34 de los 35 compromisos ligueros disputados hasta la fecha. Solo se ha cayó de once en el duelo frente al Getafe en el Coliséum por acumulación de cinco tarjetas. Santi Mina y el ruso Fedor Smolov se disputan, sobre el papel, una plaza para acompañar al morracense en la delantera.

Óscar García ha convocado para el choque ante Osasuna a 25 futbolistas, entre los que se cuentan el portero juvenil Iago Domínguez y los jugadores del filial José Fontán, Jacobo y Sergio Bermejo. La lista la completan Dragan Rosic, Pape Cheikh, Juan Hernández, Pione Sisto, Brais Méndez, Nolito y el uruguayo Gabriel Fernández.

Pese a que nada le va ya en el envite tras cumplir sobradamente y con brillantez su objetivo a falta de tres jornadas para la conclusión del campeonato, Osasuna afronta el duelo frente a los celestes sin concesiones, decidido a competir a su mejor nivel para "terminar la temporada de la mejor manera posible", según ha señalado el preparador rojillo, Jagoba Arrasate. Por ello, saltará al césped de El Sadar con el objetivo de cambiar la imagen mostrada en el Benito Villamarín y dar una alegría a su afición en medio de la suspensión de los sanfermines -los jugadores lucirán una camiseta blanco y un pañuelo rojo para conmemorar las fiestas- por causa de la pandemia del coronavirus.

La novedad en la convocatoria rojilla es el retorno del delantero Enric Gallego, uno de los jugadores más en forma del equipo hasta su reciente lesión muscular, aunque parece improbable que Arrasate lo utilice de partida esta tarde ante el Celta.