Iago Aspas realizó una lectura positiva al empate conseguido ante el Barcelona en Balaídos, aunque aseguró tras la ocasión perdonada por Nolito en el último suspiro del partido, que les quedó "la espina de haberlos podido matar".

"Es un punto contra el Barcelona en nuestro campo que habríamos firmado todos antes de comenzar, pero viendo la última ocasión y como hemos estado en los minutos finales, te queda la espina de haberlos podido matar", afirmó el artillero céltico en Movistar+.

El delantero morracense firmó un gran gol de falta que dio el empate a dos tantos en una acción que aseguró tener estudiada. "Lo habíamos visto con el entrenador de porteros al que doy las gracias. Se veía que saltaban y he visto espacio para meterla por ahí", explicó.

Aspas resaltó la buena línea que ha cogido el Celta en los últimos partidos. "Estamos peleando por no bajar y es la leche empatar con el Barcelona e irnos frustrados tras un gran segundo tiempo. En la primera no estuvimos cómodos en el terreno de juego, pero en la segunda hemos apretado muchísimo más. Nos ha condenado un fallo cuando mejor estábamos pero hemos podido empatar y llevamos 8 puntos de los 12 últimos. Es para estar muy contentos", relató.

Para el goleador celeste la clave para la reacción del equipo ha sido volver "con otra mentalidad después del parón" y recordó el mal partido contra el Villarreal como punto de inflexión para la reacción de los de Óscar García Junyent. "Ese día ninguno estuvo a la altura y el mister nos puso las pilas. Somos grandes futbolistas y podemos hacer disfrutar con nuestro fútbol a nuestra gente", dijo.

"Tenemos que cerrar esta temporada con la permanencia, puntuando en Mallorca tendremos muchísimas papeletas. La primera piedra del proyecto comenzó con Felipe Miñambres, luego el cuerpo técnico y hay buenos peloteros para hacer mucho más", sentenció.