El Celta recupera a Iago Aspas para el compromiso del sábado que viene ante el Villarreal (Balaídos, 21 horas), después de que el moañés cumpliese en Getafe el partido de sanción por acumulación de tarjetas amarillas. Será el reencuentro de Aspas con un rival ante el que el curso pasado los célticos comenzaron la remontada que les llevaría a asegurarse la permanencia en las últimas jornadas del campeonato.
Como hace casi un año, el moañés reaparece ante el conjunto castellonense y con su equipo de nuevo en una situación apurada en la clasificación, parecida a la que se encontraba el 30 de marzo de 2019, en plenas fiestas locales de la Reconquista. Entonces, los célticos afrontaban la vigésimo novena jornada de LaLiga en puestos de descenso, con 25 puntos, a cuatro de distancia de la zona de la permanencia, que entonces marcaba el conjunto amarillo con 29 puntos.
Los goles de Ekambi y de Pedraza en el primer cuarto de hora del partido ponían contra las cuerdas al equipo entrenado entonces por Fran Escribá. El técnico valenciano había cedido a las presiones de Aspas de incluirlo en el once inicial pese a las dudas sobre el estado físico del goleador. Escribá no quería correr riesgos de nuevo con un futbolista que se había perdido diez partidos por una lesión muscular y de la que había recaído cinco jornadas antes contra el Levante.
Sin el concurso del moañés, el Celta se había precipitado hacia el abismo y la situación se cumplicaba gravemente con el 0-2 en contra al que se llegó al descanso ante el Villarreal, que ampliaba a siete puntos su ventaja sobre los célticos. Pero entonces surgió Aspas como si se tratase de un personaje mitológico: acortó distancias en el marcador con un gol en el minuto 50, de falta directa, y en el 85 transformó el penalti que suponía la victoria por 3-2 de los locales. Balaídos, enloquecido, se estregaba a su estrella, que rompía a llorar en el banquillo instantes antes de que el árbitro diese por finalizado un duelo memorable y con el que arrancó 'A Nosa Reconquista'. Los diez goles de Aspas en la recta final del campeonato darían la permanencia a los celestes en la máxima categoría por octava temporada consecutiva.
Casi un año después, el Celta se prepara para recibir al Villarreal en una situación parecida, aunque menos dramática que entonces. El equipo que dirige Óscar García continúa con problemas en la clasificación, pero ahora se encuentra fuera de los puestos de descenso, con un punto de ventaja únicamente sobre un Mallorca que ocupa la décimo octava plaza de LaLiga, con 25 puntos. Además, viene de protagonizar una buena dinámica de resultados, con cinco jornadas consecutivas sin perder, en las que ha sumado 9 de 15 puntos posibles. El último lo obtuvo el sábado en Getafe, donde causó baja Iago Aspas por sanción.
El moañés volverá el sábado a Balaídos, donde viene de sumar su noveno gol de la temporada ante el Leganés. Aspas se mantiene con aspiraciones de ganar por cuarta temporada consecutiva el trofeo Zarra al máximo artillero español de LaLiga. Está a dos goles de los primeros artilleros en esta clasificación.
La estrella del Celta sólo ha sumado un doble en lo que va de temporada, frente a los cinco y un triplete que obtuvo durante la anterior. La única ocasión que celebró dos tantos de una tacada en esta campaña fue precisamente ante el Villarreal, en el Estadio de la Cerámica (1-3). Ese día, Óscar García festejaba su primera victoria con el conjunto celeste, que desde entonces no ha conocido la victoria a domicilio.
El conjunto castellonense visita Vigo de nuevo después de caer ayer en casa contra el Leganés, que remontó el gol inicial de Gerard Moreno. Los de Javier Calleja perdieron otra buena oportunidad de sumarse a la pelea por los puestos europeos. Los amarillos acudirán a Vigo sin la misma necesidad de puntos del curso pasado. En Balaídos les espera un Celta que recupera a su estrella y máximo goleador, con el que arregló el curso pasado y espera hacerlo también en este.
